Real Madrid y Atlético están librando una verdadera batalla en la liga española. Hoy esa pugna se trasladará a la Copa del Rey. El Merengue y el Colchonero protagonizarán hoy un nuevo episodio de su enconada y eterna rivalidad, en un duelo copero que rememora el vivido en el mismo escenario no hace muchos meses. Ambas plantillas acumulan ya muchos minutos, pero hay demasiado en juego para dar un paso atrás. El derby se disputará en el Santiago Bernabéu, desde las 16 (hora Argentina) y se podrá ver por DirecTV.
Por estilos de juego, será Real Madrid el que lleve la iniciativa del partido. Sin embargo, hay que tomar en cuenta la falta de regularidad de algunos jugadores que hoy serán titulares. Uno de ellos es Casillas, que si bien no recibió un gol en los últimos 682', no se enfrentó a equipos con un gran peso ofensivo. Casos similares son los de Arbeloa y Coentrao. Los laterales pueden ser el punto débil de Real Madrid en este partido ya que la falta de continuidad de estos jugadores pone en riesgo la seguridad defensiva que mostró en los últimos partidos.
La principal virtud de Real Madrid es la recuperación en campo contrario, tarea en la que Cristiano Ronaldo juega un papel fundamental con su verticalidad y contundencia de cara al arco. Sin embargo, lo práctico que es el Colchonero pondrá a prueba la capacidad asociativa de los locales, por lo que el rendimiento de Modric será determinante para que los merengues puedan transformar esa posesión en ocasiones de peligro.
En la vereda de enfrente parece que Simeone llega con la fórmula para vencer al clásico rival. El DT lo demostró en la final de la pasada edición de la Copa del Rey y también en el inicio de la presente Liga. El Cholo logró consolidar un equipo muy solidario y que juega cada partido con la intensidad de una final. Hoy no será la excepción.
Atlético de Madrid es un equipo cuyo principal fuerte es el orden defensivo, pero esta vez quiere imponer su estilo en un escenario como el Bernabéu, ganando la superioridad numérica en los costados y evitando que jugadores como Cristiano Ronaldo y Angel Di María estén mano a mano con los laterales.
Será un partido que se decidirá en pequeños detalles. La verticalidad y pegada de Real Madrid contra el orden defensivo y la intensidad de Atlético de Madrid. Sea cual sea el resultado, es poco probable que la eliminatoria se decida en este partido. La vuelta se jugará el 11 de febrero en el Vicente Calderón.
La otra semi: Un Barcelona herido recibe en el Camp Nou a una Real Sociedad motivada e ilusionada
Real Sociedad quiere meterse en la final de la Copa del Rey a costa de un Barcelona herido tras la derrota en el propio Camp Nou ante el Valencia de Pizzi. El equipo del Tata Martino, con Messi y Mascherano en el once titular, recibirá a Real Sociedad en el estadio Camp Nou desde las 18, partido que será televisado por Espn+.
Por el lado del equipo culé, no hay tiempo para depresiones. El equipo del Tata no puede permitirse parar a lamentarse en un tramo de la temporada en el que se juega todo. Por el lado de Real Sociedad, todo es ilusión y motivación, por lo que intentará pescar en río revuelto y, como mínimo, dejar la eliminatoria abierta para la vuelta en Anoeta.
“Es cierto que siempre las crisis tienen un inicio y, entonces, nosotros somos los encargados de cortarlo”, afirmó Martino en la previa.
“Además, es un partido semifinal de Copa del Rey y tenemos en nuestro poder la posibilidad de que esto no vaya más allá. Tenemos la expectativa que mañana (por hoy) podamos cortar y dejar atrás la derrota con Valencia”, añadió.
El Barsa, que ganaba 1-0 a la media hora de partido en el Camp Nou, se relajó y mostró una cara desconocida en la segunda parte, encadenando un error defensivo tras otro, lo que permitió la victoria de Valencia.
“Por 45’ mal jugados, no es suficiente para descartar al Barsa (de la carrera por la Liga). Descartarnos me parecería apresurado”, aseguró Martino, subrayando que su equipo todavía depende de sí mismo.
No obstante, este bache deportivo, con sólo 5 puntos en Liga de los últimos 12 en juego, coincide, con el sismo institucional que sacudió el club tras la dimisión hace diez días de su presidente Sandro Rosell, objeto de una demanda por el traspaso de Neymar.