"Hay que dejar los egos de lado por diez días", propuso ayer el tandilense Juan Mónaco como fórmula para conseguir un triunfo en la Copa Davis, en el inicio de la semana previa al complicado compromiso frente a Alemania del próximo fin de semana en el estadio Mary Terán de Weiss, por la primera ronda.
La frase desnudó los vaivenes en la relación de un equipo argentino en el que chocan dos personalidades fuertes como Juan Martín Del Potro —que anunció que este año no jugará la Davis para priorizar el circuito profesional— y David Nalbandian.
Ni siquiera la llegada de Martín Jaite y Mariano Zabaleta a la capitanía pudo frenar los intercambios de opinión, y en la primera conferencia de prensa oficial de la serie contra los germanos, Mónaco sacó a la luz esas diferencias. Pero es evidente que lo hizo para no repetirlas.
"Hay que aprender de los errores. Hoy estamos disfrutando con el equipo. Es muy lindo representar al país y hay que estar de la mejor manera. Hay que dejar los egos de lado por diez días y todas esas cosas, porque es lo más sano", explicó Pico, que ante la ausencia de Del Potro será el singlista número uno.
Un poco menos directo para hablar sobre ese tema fue David Nalbandian, quien remarcó que cuando se trató de la Copa Davis "siempre" la jugó, "estando como estaba", en referencia a que no siempre estuvo en las mejores condiciones físicas.
Precisamente, ahora se repetirá esa historia. Nalbandian no tiene actividad oficial desde agosto pasado, cuando un desgarro lo dejó fuera de la semifinal de la Davis ante República Checa y también del circuito internacional.
Esa extensa inactividad, sumada a los problemas físicos que tuvo y a la consecuente falta de ritmo, abrieron un interrogante sobre su físico, aunque el cordobés se encargó de descartar cualquier problema.
"Estoy contento de volver a compartir un equipo con mis compañeros. Tanto Pico como yo estamos en condiciones de llegar en buena forma", afirmó el tenista Nalbandian, al recordar también la molestia en la muñeca derecha que sufrió Pico a principios de temporada.
Por su parte, el capitán Martín Jaite descartó que el resultado de esta serie de primera ronda condicione su futuro al frente del equipo, luego de haber extendido su contrato por otros dos años, hasta fines de 2014. "Estoy muy bien, me siento respaldado por los dirigentes, jugadores, entrenadores de los jugadores y también mi cuerpo técnico", explicó.
En el análisis del encuentro que se disputará sobre polvo de ladrillo a partir del viernes, Jaite no dio indicios sobre cómo armará la estrategia, aunque lo más probable es que ponga a Mónaco y Carlos Berlocq como singlistas el viernes para resguardar el físico de Nalbandian.
El cordobés saldrá a la cancha el sábado para jugar el doble con el zurdo Horacio Zeballos, mientras que para el domingo, en primer turno estará Mónaco y, de necesitar ganar el último punto, Nalbandian reemplazaría a Berlocq.
"Será una serie muy pareja, como la que jugamos en Bamberg el año pasado", pronosticó Jaite al recordar la victoria de Argentina como visitante ante Alemania, en el inicio de la Copa Davis de 2012. Esa vez, el resultado favorable por 4 a 1 en realidad no reflejó la paridad que hubo en ese enfrentamiento.
Kohlschreiber: “Mejor sin Del Potro, pero difícil”
El alemán Philipp Kohlschreiber expresó su alegría por la ausencia de Del Potro. “Cuantos menos de los mejores argentinos jueguen mejor para nosotros. Igualmente va a ser muy difícil”, explicó. A su vez, su compañero Florian Mayer declaró: “Todos los partidos son importantes, pero el dobles puede ser el punto de inflexión de esta serie”.