Confirman que la fatal quema de pastos en la autopista fue intencional

Villa Constitución. — Una pericia de los Bomberos Zapadores de Rosario determinó que fue intencional el incendio de pastizales en la ruta 9, donde luego —y a causa de la intensa humareda— el 25 de septiembre pasado se produjo un múltiple choque que provocó 6 muertos y unos 20 heridos de distinta gravedad.

Esta pericia, sumada a decenas de testimonios recabados por el Juzgado de Instrucción en lo Penal a cargo del magistrado Rubén Bissio, comprometería seriamente a los sindicalistas de la Federación Santafesina de Trabajadores Municipales (Festram), quienes en el marco de una protesta y corte de ruta habrían sido los iniciadores de la quema de pastizales.

Carátula. "Por el momento la carátula del expediente sigue siendo la de homicidio culposo, y si bien la Fiscalía solicitó el cambio por la de estrago culposo el juez pidió que se fundamente esta solicitud", indicó ayer una fuente judicial.

Al cumplirse hoy un mes de la tragedia la causa mantiene como únicos imputados a los 13 conductores que participaron del múltiple choque, pero a medida que el juez Bissio continúe recibiendo declaraciones de otros actores la marcha del expediente podría virar abruptamente.

De hecho la Fiscalía ya habría solicitado la citación de algunos gremialistas de Festram que participaron ese día en el corte de la autopista a Buenos Aires, cuya situación se complicó tras la pericia realizada por los bomberos y por los numerosos testimonios de testigos.

En esa sintonía, el Juzgado de Instrucción solicitó la remisión de videos televisivos tomados el 25 de septiembre pasado durante la protesta gremial. Con esta prueba se pretendería identificar a "una mujer gordita" que integraba la manifestación sindical, y que habría sido la iniciadora del fuego en los pastizales de la ruta.

El accidente. Ese día, alrededor de las 14, 20 vehículos colisionaron en la mano Buenos Aires-Rosario de la ruta 9, a raíz de la existencia de una espesa cortina de humo que impedía la visión. Seis muertos y 20 heridos fue la fatal consecuencia de esta tragedia.

Más de 40 operarios de una empresa metalúrgica ubicada a metros del lugar del accidente declararon que el fuego que incendió los pastos de las inmediaciones fue iniciado durante la protesta. Y que esa acción tendería a impedir el paso de vehículos por un camino vecinal alternativo.

La Capital también registró el humo que había en el lugar del accidente, minutos antes de que ocurriera.

En ese contexto, fuentes judiciales coincidieron en indicar que "la situación de los protestantes es la más comprometida de la causa". Sin embargo, el juez también deberá determinar la responsabilidad que les cabe a los efectivos de Gendarmería Nacional que en ese momento custodiaban ese sector de la autopista, al personal de la concesionaria Vial 3 que estaba en el lugar, como también de la policía y los bomberos.

Futboleros. Los seis jóvenes fallecidos en la tragedia integraban un contingente de nueve personas que viajaban en dos autos a Rosario para presenciar el partido entre Ñuls y Boca, que se jugaba esa tarde.

Uno de los vehículos era conducido por Jorge Páez , quien viajaba con el doble propósito de alentar a los rojinegros y además esparcir en la cancha las cenizas de su padre, otro fanático ñulista fallecido hacía unos meses. Los cinco ocupantes del VW Senda blanco fallecieron en el choque.

El otro automóvil, un Pointer, lo conducía José Vidal, primo de Paéz. Allí también viajaba Mario Ceballes Ojeda, un hincha de River que le había dicho a sus padres que iba a pescar al Tigre. Por la gravedad de las heridas recibidas, Ojeda falleció al día siguiente en el Heca, donde había sido trasladado.