El clásico 150 de la historia platense finalizó con el resultado clásico: empate. Un 1 a 1 que dejó conformismo de los dos lados; que tuvo goles para que los hinchas festejaran; que tuvo expulsados por jugarlo con pierna fuerte, dejando todo; y que tuvo lesionados para lo que vendrá, aunque en este último caso la preocupación quedó para el Pincha (sobre todo por la de Verón, que sufrió un esguince con posterior distensión del ligamente lateral interno de la rodilla derecha). ¿El Mens Sana? Sigue sumando, aunque se cayó de la posición de escolta.
Hacía un par de años que no se jugaba, porque Gimnasia estaba en la B Nacional, y por eso la expectativa era mayor a la habitual. Y los condimentos del juego lo hicieron entretenido de principio a fin. Los de Troglio, que actuaron de visitantes, se pusieron rápido en ventaja (21'). Los de Pellegrino igualaron en la segunda etapa (60'), poco después de estar en ventaja numérica por la expulsión de Oreja. Y en el cierre se vivieron emociones por la lucha para gritar ganador y porque Estudiantes se quedó primero con diez (expulsado Damonte a los 90') y al toque con nueve por la lesión del Patito Rodríguez (traumatismo de torax).
El colombiano Erik Correa empezó a quedar en la historia al capitalizar un rebote corto del arquero Rulli, tras un cabezazo picante de Barsottini, para el 1 a 0.
El uruguayo Matías Aguirregaray igualó para el Pincha, tras un tiro libre que no debió cobrarse: Luna lo ejecutó fuerte abajo al palo derecho de Monetti, quien tapó con una volada impresionante, pero con mala suerte, ya que el rebote le cayó a Carrillo, quien mandó el centro atrás para que el defensor la empujara para el 1-1.
Con la paridad, Gimnasia se reacomodó en el fondo y apostó al contragolpe, mientras que Estudiantes, empujado por el aliento de su gente, no tuvo los recursos para aprovechar el hombre de más y romper el cerrojo tripero.
Y en el final el clásico se calentó cuando Damonte le pegó a Litch y vio la roja. Pero en cuanto al resultado nada cambió y así se terminó con el clásico empate.
Cuatro heridos en la previa, uno por un disparo
Cuatro heridos, uno de ellos de bala, aunque fuera de peligro, fue el resultado que arrojó un cruce entre hinchas de Estudiantes y Gimnasia en la previa del clásico, los que se trenzaron a golpes de puños y piedrazos en las inmediaciones del Estadio Ciudad de La Plata. Esto se registró cuando hinchas de Gimnasia, que venían acompañando al micro del plantel desde su salida de Estancia Chica, no fueron retenidos por el control de seguridad y llegaron a pocas cuadras del estadio. Ahí se cruzaron con los Pinchas. Hubo corridas, piedrazos y disparos con armas de fuego, uno de los cuales hirió al hincha, que fue internado en el Hospital San Roque (fuera de peligro). Y otros tres fueron atendidos por heridas cortantes.