Central expone en Bahía Blanca su condición de invicto y puntero. Las causalidades indican que es uno de los tres equipos que arrancaron a fondo en esta larga carrera. Olimpo es la valla que deberá saltar esta tarde para seguir creciendo. Lo hará en una pista que suele no caerle tan bien por historia. Y con el valor agregado de que antes de volar hacia estas tierras llegó la ansiada habilitación del lateral izquierdo Cristián Villagra, que obligó a su vez al Chacho Coudet a retocar a último momento el tablero táctico.
Coudet imaginó una cosa en la semana y terminará haciendo otra hoy. Como primera medida optó por correr a Colman al banco y mandar a Jonas Aguirre al carril izquierdo para darle mayor dinamismo al equipo. Hasta ahí la casa parecía estar en orden. Aunque el jueves a la noche el DT concentró a Villagra porque intuía que Kity iba a estar a su disposición oficialmente. Y así fue nomas. Antes de dejar Arroyo Seco para embarcar hacia esta ciudad llegó la noticia del día canalla. Desde AFA avisaban que el lateral estaba habilitado.
Si bien no hubo tiempo para hacer fútbol y probar al jugador que viene de Ucrania (ver aparte), lo cierto es que será titular porque Coudet confía a pleno en lo que puede generarle el de Morteros.
Su reinserción a Central y al fútbol argentino será ante un comprometido Olimpo. Villagra jugará en la posición que iba ocupar José Luis Fernandez, quien ahora irá al mediocampo, en la plaza donde iba a estar originariamente Jonas Aguirre. Cambio táctico obligado. Y cantado. El resto de los nombre serán los mismos que vienen de ganar en Misiones.
En cuanto al desafío del Carminatti hay que destacar que, pese a sus pergaminos, ambos irán por los laureles de la victoria. Y lejos de aferrarse al efecto triunfalista, Coudet y su fiel compañía no despegan los pies de la realidad. Tampoco se escudan ni alardean porque las estadísticas le vienen haciendo un guiño esperanzador. En la previa de cada presentación manifiestan respeto hacia el prójimo como indica la biblia deportiva.
El equipo auriazul sabe además que apenas se está acomodando a las renovadas exigencias y nutriéndose de nuevos ideales que parte de un cuerpo técnico recién llegado y que además está haciendo sus primeros pasos en este gran circo. Con ritmo firme, por cierto.
Hasta ahora es como que todo es color de rosa para los de Arroyito. Porque picaron en punta cuando pocos lo imaginaban o creían. Sólo puertas adentro confiaban en empezar a escribir una nueva página con marcado optimismo.
Racing, Tigre y Crucero del Norte ya forman parte de la linda historia. El presente marca que Central deberá ratificar su dinamismo y marcado orden táctico para no caer en la tentación una vez que la pelota cobre vida sobre el césped bahiense. Habrá que ver si puede doblegar a Olimpo. Un local que no está para regalar nada. Al contrario, urge de un triunfo tras un inicio poco feliz. Tan es así que en estos pagos hay cierto clima de inestabilidad a corto plazo si todo sigue así.
No obstante, no es un problema que deberá resolver el canalla. La solución deberá hallarla el dueño de casa. Los auriazules tienen que ocuparse sencillamente de lo suyo sin mirar el espejo ajeno. Deben seguir mejorando y potenciando lo bueno que tienen. También marchar por el carril exclusivo de la victoria para continuar alimentando con humildad los sueños propios a concretar a futuro.