En medio de una semana de trabajo relativamente corta (el equipo volvió a los entrenamientos ayer y juega el sábado) los tiempos para los lamentos parecen escasos, más cuando se pierde. De todas formas las explicaciones de lo ocurrido el pasado lunes en Mendoza estuvieron a la orden del día, teniendo en claro las cosas que deben ser corregidas de cara a Colón, que también fue parte del análisis de Miguel Angel Russo, quien en un momento de su alocución se emparentó con las declaraciones de Mauricio Caranta respecto a que "no es que un día estás tan arriba y otro tan abajo". Por eso el técnico canalla contestó con un "no" categórico cuando se le hizo mención a que a partir de ayer era borrón y cuenta nueva. "No es así, todavía es tiempo de la autocrítica que siempre hacemos", tiró.
"Sabemos que hay cosas que no hicimos bien. Costó porque en un partido parejo, al menos en el primer tiempo, el rival encontró un gol y después todo se hizo más difícil. Habíamos hablado de mantener la calma y llevar el partido, pero nos costó demasiado", razonó el técnico canalla en rueda de prensa. Y agregó: "Todo cuesta. Son partidos cerrados que se abren por una pelota parada".
Indudablemente el dolor y la bronca están latentes, aunque no exista un solo punto a partir del cual esas sensaciones se potencien.
"Perder es siempre lo que más duele. Uno quiere seguir sacando puntos de visitante porque es lo que te realza. Pero esto es siempre lo mismo, no es que un día estás tan arriba y otro tan abajo", dijo Russo.
Si algo había caracterizado a este equipo en las primeras fechas, especialmente contra River y Gimnasia, fue la capacidad de reacción ante un escenario adverso, cosa que en Mendoza no sucedió. En ese sentido el técnico argumentó que "la capacidad de reacción la tuvimos, pero el rival también nos contuvo. El fútbol no es sólo un juego de errores, sino que también están las virtudes del equipo contrario".
—¿Hasta el primer gol se dio el partido que esperaban?
—Creo que nos costó un poco el traslado por el estado del terreno y a partir de ahí lógicamente se hace otro tipo de partido.
—Ahora se viene Colón, que también está ahí arriba como Godoy Cruz, pese a que están peleando por lo mismo.
—Sí, pero recién va la cuarta fecha del torneo. Acá nada está dicho, sino que está todo por hacerse.
—¿Lo considerás un rival directo?
—Para mí todos los rivales son directos. Lo importante son los tres puntos que hay en juego, pero sobre todo porque vamos a ser nuevamente locales.
—¿Qué consideraciones hacés de Colón?
—Nosotros respetamos a todo el mundo, pero tenemos una forma de jugar y de local vamos ganando algo que es importante. Igual, los partidos hay que jugarlos, más allá del respeto hacia todos por igual. Muchos hablan de actitud, pero también hay que hablar del juego.
—¿Ante un rival de estas características va a ser clave manejarles la pelota para que el desgaste recaiga en ellos?
—Normalmente de local el mayor gasto es nuestro, pero tenemos que estar preparados para no sufrir contraataques, para manejar el partido e ir llevándolo como corresponde.
—Este Colón apuesta a explotar las debilidades del rival. ¿Eso te obliga a pensar el partido de una manera distinta?
—No hay otra que estar ordenados, sabiendo que ellos tienen jugadores muy veloces y que es un equipo que retrocede mucho y bien. Obviamente nos van a querer quitar todos los espacios, por eso habrá que tener mucha paciencia.