El gobernador Antonio Bonfatti calificó como "un triunfo de la democracia" la puesta en marcha del nuevo sistema penal que comenzará a regir plenamente el 10 de febrero del año próximo y al cual el mandatario le dio el puntapié inicial ayer en Santa Fe durante el acto en el que anunció la firma del decreto respectivo y puso en funciones a los 79 nuevos funcionarios —fiscales y defensores— que trabajarán en el régimen oral y público instaurado en los estrados provinciales.
Lo hizo ante el vicegobernador Jorge Henn, todos los ministros del gabinete provincial, funcionarios judiciales encabezados por la titular de la Corte, María Angélica Gastaldi, el presidente de la Cámara de Diputados Luis Rubeo, los intendentes de Rosario, Mónica Fein, y de Santa Fe José Corral, legisladores provinciales y nacionales e invitados especiales.
"Este es un triunfo de la democracia en Santa Fe", confesó exultante en diálogo con la prensa al finalizar la ceremonia Bonfatti y manifestó además estar "contento" porque se cerró "un ciclo" de los últimos 21 años donde "hubo tantos esfuerzos de tantos actores, tres gobiernos que se han sucedido, pero hemos logrado al fin arribar con las diferencias, los matices y las historias de cada uno al acuerdo necesario".
Para el ministro de Justicia, Juan Lewis, la plena entrada en vigencia del régimen penal que reemplazará al antiguo procedimiento escrito e inquisitivo "cambiará la fisonomía de la Justicia santafesina".
Un cambio completo. "La firma del decreto 3811 que indica que la fecha de plena puesta en vigencia del Código Procesal Penal va a ser el 10 de febrero de 2014 es un acto de trascendencia institucional mayúscula porque la fisonomía de la Justicia Penal va a cambiar por completo a lo que ha venido siendo en un centenar de años", confió Lewis.
"De ahora en más todas las etapas de un juicio, no solamente las sentencias, se van a definir en una audiencia oral y pública, lo que va a permitir a los ciudadanos ver cómo trabajan los jueces, cómo trabajan los fiscales, cómo trabajan los defensores. Por eso el nuevo sistema implica también un acercamiento de la Justicia a la gente desde el momento en que posibilita que las víctimas de los delitos participen en los procesos penales a través de la figura del querellante", ponderó el funcionario de la Casa Gris.
Obeid y Binner. Bonfatti elogió a sus dos antecesores, Jorge Obeid que fue quien convocó a los demás poderes para trabajar en la reforma del sistema penal y a Hermes Binner y su ex ministro Héctor Superti, a quienes felicitó por la implementación del sistema. Además pondero el aporte de la Corte Suprema, la decisión de los nuevos actores del sistema (de los ministerios de Defensa y de la Acusación) y la tarea del Procurador de la Corte, los colegios profesionales y "de los legisladores que sacaron todas las leyes que necesitábamos", remarcó Bonfatti.
No será igual. En su alocución también avisó el gobernador que "a partir del 10 de febrero la administración de la Justicia Penal en Santa Fe no volverá a ser igual. Las decisiones judiciales se tomarán de cara al ciudadano, no en la soledad de la oficina de un juez u ocultas entre las páginas de un expediente, sino en una audiencia oral y pública", subrayó.
En sintonía con el ministro del área, Bonfatti también destacó que "los santafesinos tendremos la posibilidad de ver cómo trabaja uno de los poderes esenciales del Estado", lo que implica "una manera de acercar la Justicia a la gente. La presencia de público significará un contralor informal a la actividad de funcionarios judiciales que hasta ahora no existía para ese sector del Estado", comparó el jefe del Ejecutivo santafesino.
El mandatario también celebró que "con la implementación de las audiencias orales estaremos desterrando el expediente al cajón de los recuerdos. Ese exponente del sistema escrito, en el que se condensa todo el proceso, no será más el elemento central del juicio ni mucho menos se esconderán decisiones trascendentes para la vida de la gente en una carpeta inaccesible para la mayoría de los ciudadanos".
Señaló como "otro cambio trascendente que posibilitará el nuevo código es la participación de la víctima. Ya lo nombrábamos cuando hablábamos de los Centros de Asistencia Judicial y la posibilidad del querellante. Durante años el principal ofendido por el delito estuvo silenciado en Tribunales. El nuevo sistema pone en el centro de la escena a la víctima —consignó Bonfatti— que puede ser escuchada, argumentar sobre su opinión del hecho y ofrecer pruebas".
El gobernador anunció que la provincia "estará dotada de herramientas que permitan enfrentar el crimen con eficacia y sin vulnerar derechos, respetando los principios establecidos por la Constitución".