La idea es cambiar figuritas. Boca busca desprenderse de uno o dos defensores centrales para
cumplir con el pedido de su entrenador, Alfio Basile: Daniel Díaz, que milita en Getafe.
Los nombres que maneja la directiva boquense para liberar espacio en el plantel y conseguir
el dinero necesario para hacer la contratación son los de los paraguayos Julio César Cáceres y
Claudio Morel Rodríguez.
Después del Cata, a Basile le interesan el mediocampista Jesús Méndez (ver página 3), de
Central; y el volante Jesús Dátolo, de Napoli de Italia.
“En Getafe estoy bien, cómodo y tranquilo. Pero igual tenemos que esperar a ver qué
ofrece Boca. Si quieren negociar, bienvenido sea”, afirmó el ex Central.
Al mismo tiempo, los dirigentes xeneizes intentan convencer al Coco de que incorpore a un
futbolista menos costoso para fortificar la última línea del equipo y así surgió el nombre de
Fabricio Fuentes.
Si bien los servicios del cordobés, de 32 años, tampoco serían los más baratos, ya que juega
en Villarreal, ganaría menos que el Cata.
Autoridades de la institución afirman que Fuentes está a la expectativa del resultado de las
negociaciones entre el club de La Ribera y Getafe.
En cuanto a los jugadores que dejarán de vestir la azul y oro en el próximo campeonato,
Basile le dijo al manager, Carlos Bianchi, que “todos son negociables”.
Lo cierto es que algunas de las dos partes promovió la búsqueda de un nuevo arquero y, por lo
tanto, es una incógnita si Roberto Abbondanzieri será parte del plantel que saldrá en búsqueda del
próximo Clausura.
En principio, El Pato se quedaría seis meses más, pero si Hilario Navarro no es tenido en
cuenta por el DT de Independiente, Américo Gallego, podría haber un cambio de planes.
Consecuentemente, se analiza la posibilidad de ofrecer al Pato Abbondanzieri como parte de pago por
el traspaso de Jesús Méndez.