El diputado nacional y titular del socialismo, Hermes Binner, sostuvo ayer que "de la derecha no se pueden esperar soluciones a los problemas del país" y manifestó su preocupación por la reciente decisión de la UCR de sellar un acuerdo electoral con el PRO y la Coalición Cívica (CC) para las generales de octubre próximo. Su par en la Cámara baja Julio Cobos desestimó, en tanto, que los afiliados al centenario partido "acompañen" la precandidatura presidencial de Mauricio Macri. Paralelamente, y fiel a su estilo, Elisa Carrió se diferenció de sus nuevos aliados: "No me financio con grandes empresarios".
Por su parte, Binner afirmó que "deberían tomar como ejemplo lo que ocurre en Santa Fe con el Frente Progresista, donde en más de 20 años de trabajo demostramos que se puede avanzar con políticas progresistas y respeto a las instituciones, sin corrupción ni abandonando los ideales".
Respecto de la resolución de la convención nacional de la UCR, el ex gobernador enfatizó: "Nos preocupa porque habíamos logrado un entendimiento alrededor de la constitución del Frente Amplio Unen (FAU), que nos contenía a pesar de las diferencias. Pero el radicalismo avanzó hacia otro espacio. Es respetable lo que hicieron, pero no lo compartimos, porque de la derecha no se pueden esperar soluciones a los problemas del país".
Fue entonces cuando Binner, quien acaba de bajarse de la puja por la Casa Rosada, hizo hincapié en que "los socialistas, junto al GEN y Libres del Sur, apoyan a Margarita Stolbizer como candidata a presidenta de la Nación".
También afirmó que desde su banca de diputado nacional seguirá "presentando ideas, proyectos y propuestas para mejorar la calidad de vida de todos los argentinos".
Por su parte, Cobos desestimó que "los radicales acompañen" la candidatura presidencial de Macri, al tiempo que apuntó contra el líder del PRO al advertir que, "si libera el cepo cambiario, habrá más inflación y se disparará el dólar".
"No creo que los radicales acompañen en las elecciones a Macri para que los represente como candidato a presidente", enfatizó el mendocino, y agregó: "Será muy difícil que lo vote (al líder del PRO)".
Además, Cobos subrayó que "hay un giro evidente hacia la derecha" en la UCR y señaló que, con la decisión de pactar con el macrismo, "será muy difícil recuperar la identidad" del partido.
Asimismo, el ex vicepresidente señaló que "muchos dirigentes muy conocidos de la UCR que apoyaron el acuerdo tuvieron que irse por la puerta de atrás del teatro en Gualeguaychú (Entre Ríos)", sede de la convención partidaria.
"Afuera estaban la Juventud Radical y muchísimos militantes que no querían el pacto y a los que no dejaron ingresar porque la convención fue cerrada y exclusiva", se quejó.
A su vez, Carrió, diputada nacional y precandidata presidencial de la CC, tomó distancia de sus aliados: "A diferencia de Macri y del radicalismo, no me financio con grandes empresarios. En realidad, soy un peligro para el establishment". Aludió así a la cena que el PRO organizó el martes pasado en la Sociedad Rural para recaudar fondos para la campaña.
Carrió también aseguró que, en caso de perder la interna presidencial contra Macri o Ernesto Sanz, acompañará "al que gane".
"Es volver para atrás". Por su parte, el aspirante presidencial por el Frente Renovador (FR), Sergio Massa, volvió a arremeter contra el acuerdo entre el PRO, la UCR y la CC al juzgar que ve "amontonados" a Macri con el ex ministro de Economía Domingo Cavallo y otros dirigentes.
"Es volver para atrás", afirmó Massa durante una visita a Florencio Varela, donde se reunió con familias sin vivienda propia y participó de una caravana que lo trasladó al centro de la ciudad.
En ese sentido, Massa consideró que "la Argentina necesita entrar al siglo XXI, no discutir si vuelve a la década del 90 o si sigue en los 70".
prueba suficiente
Afirman que "nada impide" indagar a Milani
El fiscal general ante la Cámara Federal de Córdoba, Alberto Lozada, dictaminó que "nada impide al juez federal de La Rioja, Daniel Herrera Piedrabuena, citar a declaración indagatoria" al general César Milani y otros acusados en dos casos por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura.
"La abundante prueba existente en la causa principal, que avala la imputación de la fiscal Martha Kunath, es más directa y de mayor poder convictivo que la existente en otras causas", indicó Lozada, según comunicó el portal oficial de la Procuración General de la Nación.
El fiscal de segunda instancia de Córdoba formuló ese dictamen al comparar la situación de Milani y otros ex funcionarios policiales, militares y judiciales acusados de delitos de lesa humanidad con otras causas "por violaciones a los derechos humanos durante el terrorismo de Estado que se tramitan en el mismo juzgado (riojano) y en Córdoba, en las cuales ya hay personas imputadas, procesadas y cumpliendo prisión preventiva".
El jefe del Ejército fue imputado por su presunta participación en los secuestros de Ramón Alfredo Olivera y de su padre, Pedro Adán Olivera, en marzo de 1977 en la capital riojana.
Pedro fue secuestrado en su casa el 12 de ese mes y liberado dos días después. Durante el cautiverio lo torturaron para que renunciara o se jubilara de su trabajo en la Municipalidad.
En medio de esa situación, el hombre sufrió un accidente cerebrovascular con hemiplejia que le paralizó el sector derecho de su cuerpo, tras lo cual fue abandonado por los represores en la vereda de su casa.
Esta causa también lleva adelante la investigación de la denuncia presentada el año pasado por una mujer, que reconoció a Milani entre sus secuestradores.