El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, no se privó ayer de cuestionar duramente al candidato a presidente, Mauricio Macri, y fustigar los niveles de violencia de Rosario. A la hora de abordar el pedido puntual de destinar a Rosario 2 mil efectivos federales bajo su órbita, el funcionario se despachó a su gusto: “Tenemos de 20 mil agentes federales en la ciudad de Buenos Aires, que por un capricho o una actitud egoísta del ingeniero Macri, están aferrados a la Capital Federal. Si hubiera completado su tan cuestionada Policía Metropolitana, seguramente muchos de esos hombres hoy estarían trabajando con los santafesinos”, lanzó en declaraciones a La Ocho. Tras subrayar el esfuerzo en generar cambios estructurales en la policía que realizó el gobierno santafesino y destacar el trabajo conjunto que ha desarrollado con el gobernador Antonio Bonfatti y el gobernador electo Miguel Lifschitz, subrayó: “Ustedes me conocen. A lo que me comprometo, lo cumplo. Siempre pusimos toda la voluntad para dar respuestas. No tengan dudas de que vamos a reunirnos con los compañeros trabajadores, con la provincia y buscaremos la mejor solución dentro de la administración de los recursos que tenemos. Y si necesitamos llevar algunos refuerzos más, no tengan dudas de que lo vamos a hacer”. Rosario no estuvo ajena al diagnóstico de Berni y admitió que sigue siendo “la ciudad más violenta del país. En seguridad pública, los ajustes tienen que ser permanentes y Rosario todavía no ha logrado encontrar el camino correcto para brindarle tranquilidad a los ciudadanos. Esto no quiere decir que no se está trabajando. La provincia tiene una actitud positiva y la vamos ayudar para que encuentre el rumbo y sacar para siempre a Rosario de la tapa de los diarios”.