El plantel de Belgrano que consiguió el ascenso a primera frente a River fue recibido ayer por millares de simpatizantes, quienes "custodiaron" al ómnibus desde su llegada a la ciudad de Córdoba.
El plantel de Belgrano que consiguió el ascenso a primera frente a River fue recibido ayer por millares de simpatizantes, quienes "custodiaron" al ómnibus desde su llegada a la ciudad de Córdoba.
El micro que condujo desde Buenos Aires a la delegación hizo su primera parada en el predio del barrio Villa Esquiú, donde los jugadores y el cuerpo técnico desayunaron en la fría mañana que los recibió con tres grados bajo cero.
Luego el plantel subió a un ómnibus de dos pisos sin techo, pintado de color celeste con la inscripción "Un viaje de Primera".
Simpatizantes eufóricos y con atuendos celestes saludaron al plantel al paso del vehículo, que fue seguido por una gran cantidad de automóviles tocando bocina y cuyos ocupantes hicieron flamear banderas del "Pirata".
En tanto, en lo alto del ómnibus, los jugadores, dirigentes y cuerpo técnico de Belgrano cantaron, saludaron y agradecieron las muestras de cariño que la gente les transmitió en todo el recorrido.
La nota simpática de la caravana se produjo cuando al pasar frente al zoológico de la ciudad, el ómnibus se detuvo para saludar, con un cántico unánime de jugadores e hinchas, al "pronosticador" burrito Andrés, que habita en la granja de ese paseo.
"Andrés" había augurado que River y Belgrano iban a empatar en el Monumental, ya que el viernes pasado se decidió a comer un fardo de alfalfa que estaba en medio de otros dos, cada uno con una casaca de los rivales.
El martes, antes del primer partido en Córdoba, "Andrés" había comido del fardo que tenía la camiseta de Belgrano, lo que se confirmó con el 2 a 0 en Alberdi.
Asimismo, otra multitud calculada en 10.000 personas, aguardó con banderas y globos la llegada del plantel en el centro de la ciudad, de manera especial frente al Patio Olmos, un reconocido shopping, donde se realizó el festejo central por el nuevo ascenso.
Tras unos 20 minutos en el lugar, el ómnibus se dirigió hacia el predio de Villa Esquiú, donde los jugadores se reunieron con sus familias para festejar en privado y descansar luego de la hazaña.
Entre los que participaron de la fiesta estuvieron los 2.500 hinchas que el domingo acompañaron al equipo en el Monumental.
El técnico Ricardo Zielinski, quien expresó estar "disfrutando mucho este momento", admitió que Maradona lo llamó para felicitarlo por el ascenso conseguido, algo que también hizo con algunos jugadores del plantel.