Venado Tuerto.— Un insólito hecho ocurrió a la salida de un establecimiento
educativo de esta ciudad cuando las familias de dos chicas que cursan el tercer año del colegio
ubicado en calle Alem 122 se trenzaron en una batahola que duró varios minutos frente a la escuela.
Dos de los policías que se encontraban en el lugar al momento de los incidentes recibieron heridas
leves por parte de los encolerizados padres. No hay detenidos, ni denuncia policial de ninguna de
las partes. Sólo se secuestraron algunos palos, un cuchillo y un gorro de lana que sería de uno de
los agresores.
Al parecer, y según fuentes policiales, las dos chicas arrastraban una mala
relación a pesar de cursar juntas el mismo año. Las dos son menores de edad, por lo que el secreto
de sumario es estricto. Sin embargo, es poco lo que la policía puede hacer ya que no hay denuncias
de ninguna de las dos partes y las lesiones son leves. Lo que sí llamó la atención es el lugar
elegido por las familias para enfrentarse: nada menos que frente al ex Colegio Nacional, donde las
chicas cursan los estudios secundarios.
Lo cierto es que las dos partes dirimieron sus diferencias frente a la escuela a
las 19 horas del lunes. De un lado estaban tres familiares de una de las chicas, y del otro,
aproximadamente diez personas vinculadas al entorno de la otra, los que portaban palos y otros
elementos contundentes. Además, se secuestró un cuchillo en la escena de los hechos.
Del inusual hecho, las autoridades del Comando Radioeléctrico tomaron
conocimiento por la vicedirectora de la Escuela N 446, Susana Estévez, que observó cómo los dos
grupos tenían claras intenciones de agredirse. En el lugar se encontraban dos efectivos policiales
que, al intentar separar a los grupos, recibieron unos golpes de puño.
Tras eso, los policías, una mujer y un hombre que estaban en inmediaciones del
colegio, pidieron refuerzos, y cuando los efectivos policiales se acercaron hasta el lugar, las
partes en disputa escaparon hacia distintos lugares. Una de las agredidas es una de las alumnas,
mientras que el otro, además de los dos efectivos policiales, fue el padre de la otra menor de
edad. Ambos fueron derivados al hospital Alejandro Gutiérrez y dados de alta, ya que apenas
presentaban heridas leves. Ni agredidos ni agresores prestaron declaración alguna en sede
policial.
Las dos familias son de un populoso barrio de la ciudad y al parecer tendrían
una relación conflictiva desde hace un tiempo, al igual que las dos chicas que cursan el mismo año.
La investigación es un tanto complicada, justamente porque ninguna de las partes declaró nada en la
Comisaría segunda de esta ciudad.
