Con la ilusión de reverdecer laureles olímpicos, el seleccionado argentino de básquet, con varios históricos que seguramente por última vez serán olímpicos, debutará esta tarde contra Lituania, exigente adversario al que le ganó hace cuatro años en Beijing para quedarse con la medalla de bronce. El partido de la zona A empezará a las 18.15.
El primer objetivo de Argentina será clasificar entre los cuatro mejores del grupo, integrado por seis seleccionados, para jugar los cuartos de final.
A lo largo de los años, y pese al paso del tiempo, la Generación Dorada se erigió en el conjunto colectivo que mayor confianza despierta en el argentino medio, sea o no fanático de los deportes.
La capacidad de jugadores a nivel internacional y con un gran sentido colectivo, dejando de lado los individualismos, son atributos distinguidos por todos.
La capitanía de Luis Scola, el liderazgo de Emanuel Ginóbili, la frescura de Carlos Delfino (viene de una lesión inguinal), y la garra de Andrés Nocioni son las banderas del seleccionado argentino.
Más allá de diferentes contratiempos, Argentina siempre es un rival incómodo para cualquiera. Y en Londres espera rubricarlo.
Hoy se encontrará con Lituania, cuyas figuras más destacadas son Sarunas Jasikevicius, Darius Songaila y Linas Kleiza.
Por el grupo de Argentina, jugarán hoy: a las 5, Nigeria v. Túnez; 9.30, Estados Unidos v. Francia. Por el grupo B: 7.15, Brasil v. Australia; 12.45, España v. China; 16, Rusia v. Gran Bretaña.
Por Juan Iturrez