El gobernador Antonio Bonfatti recorrió ayer las obras del Aliviador III, en Sorrento y Rauch, en la embocadura del arroyo Ludueña, aguas abajo del puente de la avenida Sorrento. Se estima que la obra estará terminada en septiembre del año que viene, ya que se construyen entre 130 y 150 metros por mes, y demandará una inversión de más de 100 millones de pesos.
La construcción del conducto principal tiene una traza que se desarrolla en su totalidad por avenida Sorrento hacia el este, con una longitud de 2.300 metros. El área de descarga en el arroyo Ludueña se ubicará en el tramo comprendido entre los puentes de calle Nansen y avenida Eduardo Carrasco, aproximadamente 400 metros aguas arriba de la descarga del arroyo en el río Paraná.
Bonfatti, acompañado por la intendenta Mónica Fein, y el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio, descendieron por una escalera de obra hasta la tubería principal, debajo de la avenida Sorrento.
"Hicimos una recorrida por el interior del conducto, a 12 metros de profundidad, para observar de cerca una obra que no se ve y, sin embargo, resolverá definitivamente los problemas de inundación de varios barrios de la ciudad, fundamentalmente de Empalme Graneros. Es un trayecto que tendrá casi dos kilómetros y medio, con un diámetro de cinco metros. Ha sido una experiencia muy interesante, que no tenemos todos los días", precisó Bonfatti.
El gobernador aprovechó la oportunidad para "felicitar a quienes han elaborado el proyecto de ingeniería, porque no es fácil imaginar cómo se puede hacer este tipo de obras en una ciudad, con muchos inconvenientes y con el agua que permanentemente va drenando", destacó y remarcó que la obra tiene "una inversión de más de cien millones de pesos que dará respuesta a muchos rosarinos".
En detalle. La Secretaría de Aguas detalló que se está trabajando en 14 pozos para acceder a los frentes de obra y ejecutar conductos de chapa galvanizada y hormigonado.
Se destacó además la realización de galerías drenantes para la depresión de napas, cuya función es permitir el avance de las excavaciones verticales y horizontales para la ejecución del conducto principal. Hoy ya se construyeron 400 metros lineales de galerías.
La ejecución de obras de protección se lleva adelante de acuerdo con las prioridades definidas en cada proyecto, se revisan los niveles de protección de obras de defensa urbana existentes y se desarrolla una gestión integral de la información (pronósticos, sistemas de alerta hidrológico urbanos y redes de medición, entre otras cuestiones técnicas).