Cuando ya suman ocho las muertes por gripe A en el país (siete en la provincia de Buenos Aires y una en Córdoba, ver aparte), la recomendación de vacunarse sonó fuerte ayer en Santa Fe, donde la campaña no cubre hasta ahora ni al 40 por ciento de la población en riesgo. Además de la A H1N1, este año las cepas que circulan son la A H3N2 y la B, con predominio de la primera desde hace tres semanas, explicó ayer la responsable de Epidemiología municipal, Analía Chumpitaz. El pico, de todos modos, aún no llegó: se espera para dentro de 10 ó 15 días. Aunque los casos confirmados en la provincia eran siete, dijo el ministro de Salud, Miguel Cappiello, "hay muchísimos más sospechosos" ya que, a diferencia de 2009, no todos los cuadros de gripe A necesitan ratificación por laboratorio: simplemente se tratan como tales, con medicación antiviral sólo cuando es necesario.
"No estamos valorando la incidencia sobre toda la población, por eso se realizan análisis sólo a pacientes en riesgo y en unidades centinela", detalló Chumpitaz. La médica explicó que "la circulación viral en la región está dentro de lo esperable", aunque hace tres semanas se advirtió una preeminencia de la cepa A N1 H1, la misma que en el 2009 causó la pandemia mundial.
Para hacer esos estudios en forma "rápida y certera", aseguró Cappiello, "la provincia cuenta con todos los insumos necesarios, aun cuando la Nación no envía hisopos ni reactivos". Y, si bien "este año la vacuna vino demorada", en la reunión ordinaria del Consejo Federal de Salud el pasado fin de semana el ministro de Salud nacional, Juan Manzur, pidió "intensificar" la campaña antigripal para todas las personas comprendidas en los grupos de riesgo de todo el país".
Santa Fe también muestra resultados poco satisfactorios: la vacunación no cubre ni al 40 por ciento de quienes la necesitan: trabajadores de la salud, bebés de 6 meses a dos años, mayores de 65, embarazadas y puérperas, y pacientes con patologías de base, como enfermos cardiovasculares y pulmonares, inmunodeprimidos y pacientes con obesidad.
Para el resto de la población "queda a criterio del médico de cabecera", contó Chumpitaz. Pero a recomendación fue inequívoca: quienes aún no se vacunaron y pertenecen a un grupo de riesgo deben hacerlo "lo antes posible".
Y si ya existen síntomas de gripe, el consejo pasa por "acudir rápidamente al médico", no automedicarse y adoptar el aislamiento. "Es muy importante: si se está enfermo no hay que ir a trabajar ni a la escuela", recordó Chumpitaz. Como prevención, el lavado de manos es "clave", ya que se trata de un virus con "alta contagiabilidad".
Camas y medicación. En cuanto a la disponibilidad del Tamiflú (el medicamento indicado en algunos casos puntuales), Cappiello aseguró que "hay abundancia de stock".
Aunque todos confían en que la gripe no provoque este año más casos que los estadísticamente esperables, el ministro también llevó tranquilidad sobre la capacidad de la salud pública, podemos estar sobredemandados, pero no desbordados", dijo.