Una nena de apenas cinco años se escapó de un salón infantil donde se festejaba el cumpleaños de una compañera de jardín de infantes. Asustada con la aparición de un animador disfrazado de pirata, la chiquita abrió la puerta de calle, que estaba con llave, y se fue. Según los padres, cruzó una avenida e hizo varias cuadras sola hasta que le dijo a alguien que estaba perdida. Según la encargada del local, sólo hizo unos metros hasta que un papá se percató y la fue a buscar. Algo es seguro, la nena se retiró de un lugar donde nunca tendría que haber podido salir.
El cumpleaños fue el jueves 14 de febrero y se organizó en el salón Quó Eventos, que funciona en Santiago 150. Hasta ese lugar, Damián Carabajal llevó a su hija Tiara, ya que de 18 a 21 se celebraba el cumpleaños. "La dejé y me fui tranquilo, como hacen ahora, que los padres no se quedan", contó el hombre, quien trabaja de empleado administrativo en el local de Amsafé ubicado en Catamarca al 2300.
Los relatos de lo que sucedió son diferentes. Mientras los padres sostienen que la nena "estuvo perdida", la encargada del local aseguró que sólo llego hasta la vereda.
Sin embargo, coinciden en que fue la aparición de un animador disfrazado del famoso personaje de la película "Piratas del Caribe" Jack Sparrow lo que la asustó, e incluso ella misma lo recuerda. "A mí me gustan las princesas, no los piratas", dijo. Y hasta la encargada del salón admitió que la nena abrió sola la puerta que estaba cerrada con llave.
Versiones. "La había dejado en el cumpleaños y estaba tranquilo. De pronto me llamaron de mi trabajo, que queda a pocas cuadras del salón, y me dijeron que había una nena que decía ser mi hija. Les pedí que me la describieran, porque dudé de que fuera alguien que quisiera engañarme, pero me dijeron cómo estaba vestida y era ella. Así que la fui a buscar", relató Carabajal.
Sobre cómo la nena llegó hasta el local de Amsafé, poco se sabe. Aparentemente, cruzó Salta y llegó hasta el bar Piluso, donde le dijo a un empleado de allí dónde trabaja su papá y él fue el que la llevó. "¿Qué hubiera pasado si la encontraba una mala persona o si cuándo cruzaba la calle un auto la atropellaba?", se preguntaba todavía ayer Carabajal.
"Acá lo grave es que mi hija estuvo perdida y nadie se dio cuenta, incluso una vez que mi marido salió del shock fue al lugar a hablar con el papá de la cumpleañera y ni él se había dado cuenta", agregó Marisa Quinteros, mamá de la nena.
Su marido señaló que fue hasta el salón de eventos "para advertirles de la situación, para que a nadie le vuelva a pasar y para que haya alguien controlando en la puerta", y puntualizó: "No queremos hacer demandas ni nada, pero sí que a nadie más le pase". E incluso consideró que "parte de la responsabilidad la tenemos todos los padres, que contratamos un lugar para los cumpleaños de los chicos y ni siquiera preguntamos si están habilitados".
Una de las encargadas del local admitió ayer que la nena "se asustó, empezó a correr, abrió la puerta con llave y salió", pero sin dudar afirmó que "es mentira" que haya estado perdida. Y recalcó: "El papá mismo la fue a buscar al local, yo le abrí la puerta y escuché cuando le decían lo que había pasado".
La mujer contó que "la puerta estaba cerrada con llave, porque así se mantienen todo el tiempo, y la nena estaba en el sector de atrás del local y adelante había mesas con gente mayor", y relató que en un momento la pequeña "abrió la puerta y salió a la vereda, pero el padre de la cumpleañera fue enseguida a buscarla".
Sobre el hecho de que los padres de Tiara fueron a buscarla al local de Amsafé, la encargada lo negó y dijo que la nena "nunca estuvo perdida. Es más, yo le abrí la puerta al papá cuando la vino a buscar y no me hizo ningún reclamo. Es más, escuché cuando los padres de la cumpleañera le dijeron lo que había pasado y él dijo que no había problema". Versiones encontradas pero una coincidencia. La nena ganó la calle sola y se fue de un lugar del que jamás debería haber podido salir.