Santa Fe.— El juez santafesino Jorge Patrizi resolvió archivar la causa que
involucra a su colega Rubén Saurín por presunto robo de energía en su vivienda del barrio
Guadalupe, en la capital provincial. Para el titular del juzgado de Instrucción Nº 8 no existen
elementos que acrediten un presunto consumo irregular. Pero la fiscal de la causa, Graciela Parma,
no está de acuerdo y apeló la resolución.
"Para esta fiscalía los expedientes no tienen rostro, de modo que vamos
investigar este caso con el mismo rigor que lo hacemos en todas las causas independientemente de
que se encuentre involucrado un magistrado judicial o un ciudadano común", subrayó Parma en
declaraciones a la prensa santafesina.
Es que, a juicio de la fiscalía, "sí existen elementos para proseguir con la
investigación. Por eso hemos apelado la resolución del juez Patrizi, para que el caso sea analizado
por la Cámara", sostuvo ayer la funcionaria judicial en declaraciones a la prensa de la ciudad de
Santa Fe.
Supuesta conexión. El chalé en cuestión se levanta a orillas de la laguna
Setúbal. Hasta esa coqueta zona del noreste santafesino llegaron a fines del mes de marzo pasado
inspectores de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), quienes labraron un acta de infracción en
el domicilio particular del juez Saurín por una supuesta conexión directa clandestina. Esa
documentación fue aportada por las autoridades de la EPE a la Justicia capitalina, en cuyos
estrados se abrió una causa instada por la fiscal Parma.
Ante eso el magistrado le habría presentado al juez Patrizi una factura donde
constaría el consumo registrado y pagado entre diciembre y febrero del corriente año en el que se
consignaría un importe de 180 pesos bimestrales. Su defensa apuntó contra la legalidad de los
operativos de la EPE porque no concurren a los domicilios con un escribano público que certifique
lo actuado.
Según trascendió, la verificación al medidor de la vivienda de calle Italia 7718
hecha —según constatación ante escribano público— por un electricista, presentó un
estado normal y no denotó las irregularidades apuntadas. Según el técnico, el cable encontrado por
la EPE no está conectado al tablero primario de la vivienda.
El procedimiento efectuado por el personal de la empresa se había limitado a un
examen exterior del medidor, pero no se realizó ninguna medida idónea para constatar la conexión a
la corriente eléctrica en el interior de la vivienda. Por lo tanto se acreditó el consumo de
corriente eléctrica dentro de la vivienda del cable constatado por la EPE.
"No está agotada". Estos y otros elementos llevaron a Patrizi a archivar el
expediente. Pero la representante del ministerio público dijo ayer que la causa, lejos de estar
cerrada, "fue apelada por esta fiscalía al día siguiente de la decisión del juez y ahora aguarda
resolución del fiscal de Cámara. Para nosotros los expedientes no tienen rostro de modo que vamos
investigar este caso con el mismo rigor que lo hacemos en todas las causas independientemente de
que se encuentre involucrado un magistrado judicial o un ciudadano común", subrayó la fiscal
santafesina.
Parma insistió en que disiente con la determinación del juez actuante, en el
sentido de que de los elementos obrantes no surge la comisión de un ilícito perseguible de oficio.
"Hay elementos de prueba que no se han diligenciado debidamente; entre otros, una ampliación de la
pericia que no me satisface en lo relacionado con las conclusiones del perito, porque no se explaya
suficientemente sobre los puntos que ha planteado la fiscalía", aseveró la funcionaria
judicial.
Más allá de que la Cámara de Apelaciones admita o rechace su planteo, la fiscal
recordó además que "el archivo en las causas penales no causa estado, de modo que si en algún
momento apareciera alguna prueba o elemento de juicio que no se tuvo en cuenta en la investigación,
la causa podría reabrirse".