Se sumó el lunes a los trabajos con el grupo y no tiene dudas de que una semana
le alcanzará para estar al nivel de ser considerado para jugar. Pablo Alvarez aparece como una
alternativa sólida para regresar justo en el clásico, ya sea cumpliendo funciones de lateral
derecho como de izquierdo, y al ex Boca y Estudiantes lo que le sobra es fe para estar el domingo
frente a Newell’s.
"Soy muy optimista, pero a la vez sincero y realista, y sé
que la última palabra la tiene el técnico", expresó ayer luego del entrenamiento canalla en Arroyo
Seco. Y sus gestos y forma de expresarse denotan que seguramente estará en la consideración de
Miguel Angel Russo para estar entre los once.
—¿Das alguna ventaja por no venir jugando?
—No. Llego al ciento por ciento. Desde el momento que
empecé a entrenar a la par de mis compañeros es porque estoy apto para jugar.
—Queda claro que hace rato estás esperando este
momento de volver y que no te querés perder el clásico por nada.
—Es así. Hace dos semanas que estoy trabajando para
este partido, que no sé si voy a jugarlo. Pero tengo muchas ganas. Empecé el lunes junto a mis
compañeros y quiero demostrarles a ellos y al técnico que puedo tener un lugar.
—Das la impresión de que te ves más adentro que
afuera.
—(Sonrisas) Eso te lo puede decir Russo. Hace rato
que espero este momento y ojalá tenga mi chance.
—¿Sería indistinto jugar sobre un lateral o sobre el
otro?
—Sí. Jugué mucho tiempo por los dos lados y no es un
impedimento. Con tal de jugar voy al arco (risas).
—¿Central llega en momento ideal al clásico?
—Creo que sí porque venimos en alza. Pero hay que ser
realistas y tenemos que sumar de a tres. Es un partido aparte con todo lo que se dice, pero no
tenemos que desviarnos del objetivo de que hay que sumar para el promedio.
—Igual, el clásico es especial.
—Es cierto. Durante la semana, o desde mucho antes,
se habla. Esta ciudad lo vive especialmente. Igual, nosotros debemos tomarlo con mucha
tranquilidad, y con la seriedad y el compromiso que corresponde.
—¿Influye en algo que los dos últimos clásicos los
haya ganado Newell’s? ¿La presión es compartida o la tiene más Central?
—Tenemos presión todos los partidos y debemos salir a
ganar siempre. El clásico es especial pero, reitero, nuestra meta es sumar porque estamos en una
situación complicada y los tiempos se acortan.
—Esto de jugar clásicos la sabés lunga. Boca-River,
Estudiantes-Gimnasia y ahora el rosarino.
—Me tocó salir bien de todos los clásicos, esperemos
que este no sea la excepción.
—Le tiraste la presión a Russo.
—(Sonrisas) No, él lo sabe y sabe qué podemos aportarle cada uno.
Seguro que plantará bien el equipo. l