Santa Fe.— Familiares y pacientes que figuran en lista de espera para ser
trasplantados reclaman que el Estado santafesino despliegue políticas activas que incentiven la
donación de órganos. El pedido tiene un fundamento: en los últimos cinco años ha venido
descendiendo en la provincia la tasa de donantes reales por millón de habitantes, que aún es la más
baja de los últimos siete años. Mientras, en otras provincias de similares características
socioeconómicas la relación se ha mantenido o aumentado.
Por tal razón, representantes de un grupo de pacientes en lista de
espera para trasplante se reunieron días pasados con la vicegobernadora Griselda Tessio, y le
plantearon su preocupación por el descenso en las cifras de donaciones de órganos en la provincia
de Santa Fe desde 2003.
Desde 2003. En efecto, según los datos que aportaron, en aquel año la tasa fue de 8,93
donantes reales por millón de habitantes. El guarismo se incrementó incluso hasta 2005, cuando
alcanzó la cifra histórica de 11.96 por millón: pero luego fue decreciendo hasta 2009, en que llegó
a 8,88, aún menor que el de 2003. (ver gráfico).
Estuvieron presentes en la reunión Sebastián Braco y José Faccenda, en
representación de los pacientes en lista de espera para trasplante renal; Eduardo Tubio,
trasplantado renal y en calidad de asesores los médicos Pedro Zukas, presidente de la OGN Donar, y
Luis Gaite, jefe del Equipo de Trasplante de la Clínica de Nefrología de esta ciudad.
En la reunión se abordaron los distintos aspectos que hacen al proceso
de donación y los pasos necesarios para concretar finalmente el trasplante, analizando los posibles
factores que hacen que en la provincia de Santa Fe haya venido disminuyendo la tasa de donantes
reales. Frente a esto, Tessio se mostró sensible al problema y prometió su apoyo en cuanto esté a
su alcance para abordar el problema.
La medida más inmediata será una intervención de la vicegobernadora en
la gestión de una reunión entre los pacientes y el Ministro de Salud, Miguel Angel Capiello, para
analizar las causas del problema y lograr revertir la tendencia negativa.
“El trasplante es la única esperanza para un gran número de
personas en lista de espera, para lograr una calidad de vida cercana a la normal”, le dijeron
a la vicegobernadora los pacientes.
Se considera donante real a la persona fallecida a la cual se practica
la ablación de al menos un órgano válido para trasplante. Sólo el 1 por ciento de los
fallecimientos son aptos para la donación de órganos con fines de trasplante, ya que deben
producirse por causas que no afectan a los órganos a trasplantar, a partir de la muerte cerebral
ocurrida en las unidades de terapia intensiva. l