Si la Fiscalía de Estado de la provincia avala el nuevo cuadro tarifario propuesto por el
Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, desde este mes comenzarán a regir cinco
rangos distintos en la tarifa del agua potable y cloacas, que oscilarán entre el 19 y el 80 por
ciento de suba escalonada a lo largo de 6 meses. Para el total de los clientes residenciales se
pasará de pagar 29 pesos por bimestre a 43 pesos, lo que implicará un aumento de 14 pesos promedio
entre los 615 mil usuarios distribuidos en todo el territorio santafesino. Con este esquema, Assa
cubrirá el déficit de sus costos operativos en un 50 por ciento; el resto serán aportes en
subsidios desde el tesoro provincial.
El aumento se pagará a lo largo de tres bimestres. A los que menos
consumen les llegará en una sola boleta, al tiempo que al resto de los clientes se le cobrará en
etapas (ver infografía).
La sociedad anónima estatal prepara con este nuevo esquema un sistema
progresivo para que el servicio esté orientado al consumo y, por ende, pague más el que más utiliza
el agua. Para ello, debería ampliar la cobertura de sus clientes que cuentan con micromedición
(instalación de medidores domiciliarios), que en la actualidad asciende a un 15 por ciento del
total.
La eliminación de la tarifa plana que arrastra la compañía desde la
privatizada Aguas Provinciales de Santa Fe se dio en el marco de dos audiencias públicas, en donde
Assa propuso un reajuste y los usuarios y el Ente Regulador del Servicio Sanitario (Enress) le
agregaron la división del cuadro tarifario en cinco rangos.
El primero tendrá una suba del 19 por ciento y representa un
departamento de uno o dos dormitorios. El segundo rango será para clientes que vivan en
departamentos de dos o tres dormitorios, quienes pagarán en promedio un aumento del 42 por ciento.
El tercer ítem apunta a las casas o departamentos de gran capacidad. Allí el incremento tarifario
será del 53 por ciento. Además, se aplicará un 65 por ciento al final del tercer bimestre para
residencias de lujo de 900 metros cuadrados de superficie. El 80 por ciento será exclusivo para
clientes no residenciales de gran consumo (5 mil litros por día) y superficie. Hay 55 mil usuarios
de este tipo en Santa Fe.































