Admiten fallas en los operativos de control cuando hay partidos de fútbol

El municipio admitió inconvenientes en los operativos cuando hay partidos del fútbol oficial en Rosario. "Los problemas surgen en una ciudad donde hay un partido de fútbol y al mismo tiempo hay carnavales y eventos en los barrios. La verdad es que hay que hacer un despliegue de fuerzas de control importantísimo", planteó el secretario de Control y Convivencia Ciudadana municipal, Pablo Seghezzo.

De esta forma, el funcionario salió al cruce de las críticas del gremio de los empleados municipales y de los choferes de colectivos. Los inspectores de tránsito resolvieron no prestar servicio de adicionales hasta tanto haya refuerzo policial después de la agresión sufrida por una agente.

Los colectiveros denunciaron agresiones violentas a bordo de las unidades los días que juegan Central y Newell's en Rosario. "Rompen los vidrios, lunetas, suben arriba del techo, es un desastre", planteó Manuel Cornejo, el líder del gremio.

"Estamos al tanto del pedido de los inspectores, que surgió tras la agresión a una inspectora en el partido del sábado. Ya teníamos previstas reuniones con el director de Tránsito, con la Unidad Regional II y con el Ministerio de Seguridad, como para coordinar mejor estos operativos. En el medio surgió esta asamblea y las declaraciones que hacen algunos trabajadores", señaló Seghezzo.

En contacto con La Ocho, el funcionario estimó que el inconveniente será solucionado. "Venimos coordinando de manera excelente con la Unidad Regional II de policía desde el inicio de nuestra labor y es un tema que se puede solucionar", afirmó.

Seghezzo destacó que todos los operativos de control en el espacio público se realizan "con la coordinación y apoyo de la policía, no ha habido año en la Municipalidad en donde se haya hecho la cantidad de operativos que se viene haciendo".

Por su parte, el concejal Jorge Boasso recordó su pedido para que haya presencia policial en las unidades del transporte que llevan hinchas a las canchas de fútbol. "La policía debe disuadir ese mal comportamiento de algunos y salvaguarden de posibles robos tanto al chófer como a los pasajeros, además de evitar destrozos en las unidades", fundamentó.