El viaje de Central a Posadas no fue del todo bueno, al menos para una parte de la delegación. Después del incidente los protagonistas lo contaron como una anécdota, pero el susto fue grande. ¿Qué fue lo que pasó? Uno de los chárter, que había sido demorado en Resistencia, Chaco, por un frente de tormenta, se despistó en el aeropuerto Libertador General José de San Martín, de Posadas. En un primer momento se habló de que el problema había sido en uno de los comandos de la rueda delantera del tren de aterrizaje, pero personal especializado le dijo a Ovación que se trató de un “fuerte viento de cola” en el momento de aterrizar (ver aparte). Lo concreto es que el avión terminó fuera de la cinta asfáltica y la tripulación debió ser socorrida por los bomberos. Allí viajaban tres futbolistas (Federico Carrizo, Alejandro Gagliardi y Gerardo Pérez), el presidente Norberto Speciale, el vice segundo Julio Colabianchi, Leonardo Mónaco (Tribunal de Disciplina), el síndico Hugo Ferrara, el secretario del departamento fútbol Rubén Massei, Hugo Gottardi (ayudante de campo de Russo), Guillermo Cinquetti (preparador físico), Hernán Castellano (entrenador de arqueros), más los kinesiólogos, los encargados de la utilería y la seguridad. Mucho más tranquilo fue el viaje del resto del plantel con Russo y el médico Pablo Colella, quienes volaron directamente, sin escalas hacia la capital misionera.
Ese segundo avión, de la empresa Baires Fly, paró en Resistencia. Allí las autoridades aeroportuarias lo retuvieron poco más de una hora por el frente de tormenta que había en esta parte del país. El problema fue cuando la aeronave tocó suelo misionero.
Cuando eso sucedió una fuerte ráfaga de viento provocó que los pilotos perdieran el control de la nave. “El avión quedó loco y se fue para todos lados”, le dijo Speciale a Ovación en un alto del almuerzo, ya en el hotel La Misión, donde se hospedó la delegación.
“Fue nada más que un susto, por suerte la podemos contar”, agregó el presidente canalla, quien confirmó que el avión se salió de pista y detuvo su marcha “en medio del pasto y del barro”. Fue por eso que una dotación de bomberos debió entrar en acción.
Después del incidente en el que ninguno de los 14 pasajeros ni de la tripulación sufrió lesiones, los integrantes de la delegación fueron trasladados al hotel.
Para retornar a Rosario los dirigentes podrán hacerlo por tierra o bien contratar un nuevo avión, ya que el que sufrió el despiste quedará bajo custodia hasta que le realicen todos los peritajes correspondientes. Mientras, Russo, Colella y el resto de los jugadores no tuvieron ningún inconveniente. Viajaron directamente de Rosario a Posadas, pero sin sobresaltos. “La verdad que fue un viaje tranquilo. Tuvimos que esquivar la tormenta, pero no más que eso”, le dijo Russo a Ovación en el mismo aeropuerto y mientras la segunda aeronave aún se encontraba varada en Resistencia.
Se trató de un accidente “grave”, según las fuentes consultadas, pero del que sólo quedó la sensación de susto.
El viento metió la cola. Un par de horas después de ocurrido el accidente, Ovación se contactó con Juan Pablo Biondi, jefe de prensa de la Anac (Administración Nacional de Aviación Civil), quien confirmó que el siniestro se produjo a las 13.50, con un avión de la empresa Baires Fly, dominio LV WTE y en el que viajaban 14 pasajeros más la tripulación. Biondi explicó que el problema no fue con el tren de aterrizaje, sino que lo que produjo el despiste fue un “fuerte viento de cola”. Es más, aseguró que una vez que los pasajeros fueron trasladados al hotel, la aeronave llegó hasta la plataforma, frente a la terminal, por sus propios medios. “Por supuesto todo esto quedará sujeto a una investigación”señaló. Quien tomó cartas en el asunto inmediatamente fue la Junta de Accidentes de Transporte. “Por una cuestión de protocolo y de seguridad, más allá de que se trate de un accidente de menor o mayor grado, el avión quedará en el lugar para que se realicen las pericias correspondientes”, agregó Biondi, dando a entender que para el regreso el club, en caso de querer retornar por aire, deberá contratar una nueva aeronave y descartar la anterior.