La brasileña BRF, una de las grandes compañías mundiales de alimentos, vendió en 60 millones de dólares su unidad argentina, Quickfood, a la también brasileña Marfrig. El traspaso incluye la marca Paty. La firma compradora se transforma en la mayor productora de hamburguesas del planeta.
Quickfood ya había sido propiedad de Marfrig, que acordó retomar el control tras adquirir el 91,89 por ciento de su capital social.
La firma que supo pertenecer a la familia Bameule opera en sus plantas de Baradero, San Jorge y Arroyo Seco, con una capacidad de faena de más de 600 cabezas de ganado por día.
BRF acordó vender también a Marfrig su planta y maquinaria en Varzea Grande, en la región central de Brasil, por 100 millones de reales (unos 25,50 millones de dólares) y mejora así su proceso de desendeudamiento.
"Con esta transacción damos un paso importante en la reducción del endeudamiento de BRF, en línea con el plan anunciado en junio", afirmó el directivo de la compañía Lorival Luz.
BRF anunció en julio un plan de reestructuración global que incluye la venta de activos por 1.300 millones de dólares en Europa, Argentina y Tailandia. La firma tomó esa decisión para hacer frente a los problemas financieros derivados, entre otras cosas, de denuncias de corrupción en el país vecino.
Con esta jugada Marfrig volvería a tener presencia fuerte en la Argentina. En la actualidad cuenta solo con una planta de procesamiento en Villa Mercedes (San Luis) pero llegó a tener bajo su poder siete frigoríficos.
El homicidio se registró en los últimos minutos del martes en Magallanes y avenida Pellegrini. La policía investiga si le dispararon desde una moto.
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