La economía argentina crecería este año apenas 0,5 por ciento, estimó un informe de la consultora Economía&Regiones (E&R), aunque advirtió que si el país “no accede a todo el financiamiento” que necesita “el nivel de actividad podría desacelerarse más”.
“La economía argentina no tiene de donde agarrarse para volver al sendero del crecimiento en el corto plazo; y en consecuencia nuestro escenario base proyecta una tasa de expansión del PBI en torno a +0,5 por ciento en 2016”, proyectó.
Y, alertó que “si no se accede a todo el financiamiento que el gradualismo fiscal necesita, el Banco Central (BCRA) tendrá que emitir más y el nivel de actividad podría desacelerarse más en 2016”.
Un año partido en dos. Según el análisis, “el presente año estará partido en dos, con una primera mitad en el cual el nivel de actividad económica se contraerá; y una segunda mitad en la cual la performance de la economía real será un poco mejor”.
En este escenario, la consultora prevé “una relación inversa entre inflación y nivel de actividad”.
“En 2016 la inflación interanual tendría un comportamiento con forma de ’n’, mientras que el nivel de actividad mostraría una trayectoria con forma de ’u’”, graficó.
El informe sostuvo que “la velocidad y la fuerza de la ’n’ y la ’u’ dependerán positivamente del nivel de deuda que pueda colocar Argentina”.
En este sentido, afirmó que “a más deuda, menos inflación y mejor performance de la economía real”.
Por el contrario, explicó que “si no se puede colocar toda la deuda necesaria a tasas razonables, habrá más financiamiento del BCRA con emisión monetaria” para asistir al Tesoro, y en consecuencia “más inflación, menor poder adquisitico y menor crecimiento” y “peor comportamiento del nivel de actividad”.
En pocas palabras, “a menor deuda, deberá haber más emisión del Banco Central para asistir al Tesoro y en consecuencia, más inflación, más devaluación, menor poder adquisitivo y menor crecimiento económico”, indicó la consultora.
“Esperamos que la dinámica del nivel de actividad de 2016 no sea muy diferente a la del promedio de los últimos años”, indicó.
Meta difícil. Por el lado de la inflación, el cumplimiento de la pauta inflacionaria del ministro Alfonso Prat Gay “parecería exigente”, dijo E&R y señaló que “concretamente, una inflación en línea con la pauta pre establecida (25%/20%) parece una tarea difícil de cumplir”.
Según detalló, “dado que la política monetaria opera con un rezago de entre 12 y 18 meses entre que se emite y se genera inflación, Alejandro Vanoli dejó un piso de inflación elevado que es difícil perforar, más aún si se considera que el BCRA (según lo anunciado) emitiría 165.000 mil millones de pesos para financiar al Tesoro en 2016”.
Así, “lo más probable sería un escenario con una inflación promedio
anual por arriba de la pauta, pero desacelerándose en la segunda parte del año cuando los registros mensuales podrían ubicarse alrededor del 24%/25%”.
No obstante, remarcó que “en la medida que no se obtenga todo el financiamiento necesario y en consecuencia el Banco Central tenga que emitir más, la inflación promedio podría terminar siendo más alta”, dijo el relevamiento.
Si se observan los sectores, aclaró que “la recesión de Brasil, cuyo PBI volvería a contraerse en 2016, impide que la producción y exportación de la industria automotriz mejore, lo cual termina poniéndole un ancla a todo el sector manufacturero que no crecería en 2016”.