El presidente Mauricio Macri consideró ayer que la aprobación del presupuesto 2019 "es un paso adelante" porque demuestra que se entendió que hay que empezar a ser responsables, serios".
El presidente Mauricio Macri consideró ayer que la aprobación del presupuesto 2019 "es un paso adelante" porque demuestra que se entendió que hay que empezar a ser responsables, serios".
"No podíamos seguir viviendo por arriba de nuestras posibilidades", subrayó, y reiteró que el país tiene "los impuestos más altos de la región, y tenemos que bajarlos".
Ayer a la madrugada, y tras más de 13 horas de debate, la Cámara alta convirtió en ley el presupuesto 2019 con 45 votos favorables (Cambiemos, parte del bloque Justicialista y partidos provinciales) y 24 en contra (el kirchnerismo, nueve miembros del bloque Justicialista, otros peronistas y la representante del Frente Progresista rionegrino y Proyecto Sur). Hubo una abstención y dos ausentes.
Con los números asegurados, ayer Macri se mostró satisfecho con la votación del Senado. Lo hizo en declaraciones a una radio pampeana. "Más que nada es algo que nos propusimos una mayoría de argentinos que entendimos que tenemos que empezar a ser responsables, serios, no podíamos seguir viviendo por arriba de nuestras posibilidades", comentó.
"A nivel nacional no podíamos seguir gastando más de lo que tenemos", y analizó que es lo que "uno ve si analiza décadas de la Argentina", apuntó, aunque aclaró que la provincia de La Pampa "es una buena excepción porque ha tenido la mayoría de los años equilibrio fiscal".
Macri reiteró que hace falta bajar la presión impositiva, para lo cual "necesitamos gente que administre desde la política con cuidado, sabiendo cuáles son las prioridades, ocupándose de la gente, no de su entorno familiar y político".
El presupuesto 2019 "empieza a encaminar esta responsabilidad de que, al menos a nivel, como lo llaman, primario, antes de los costos de la deuda, la Argentina tenga equilibrio, que gastemos lo mismo que ingresa", agregó.
"Para lograrlo, en esta ocasión, tuvimos que apelar en emergencia por lo que estábamos viviendo a un impuesto extraordinario que solamente va a durar dos años y que se va ir achicando en el tiempo porque son cuatro pesos por cada dólar de exportación", en alusión al impuesto aplicado por su gestión a las exportaciones.
"Eso es como el último gran aporte que ha hecho el sector privado, excepcional, para que desde la política se hagan los deberes", apuntó.
Macri dijo que ese esfuerzo es para ir "poniendo en caja todos los privilegios, los abusos que se han ido cometiendo y se han cristalizado en un presupuesto que nos obligó a tener que pedir plata prestada durante mucho tiempo, como pasó también en el 2016 y en el 2017, que tuvimos que pedir plata prestada para pagar esos gastos que estaban por arriba de nuestras posibilidades".
Remarcó que el eje al que se apunta "es a lograr ese equilibrio". "Este presupuesto es un paso adelante, pero creo que esto es un compromiso que comienza y que debe continuar para siempre, porque los países serios se manejan de esa manera, se manejan con un equilibrio y con gobernantes que rinden cuentas, que se manejan en forma transparente", cerró el mandatario.