Las automotrices, el campo y los bancos son los sectores que experimentaron mayor dinamismo en los últimos años en la Argentina de la mano de un proceso de alta rentabilidad que les permitió además consolidar sus planes de expansión. En un año electoral, los interrogantes sobre el curso del modelo económico, los referentes del mundo empresario vinculados a estas actividades coincidieron en que existen grandes oportunidades para continuar "por el sendero del desarrollo" y por eso planean continuar con sus planes de inversión, aunque reconocen que el camino podría ser menos sinuoso si se produjeran algunos cambios en la política económica nacional.
En el marco del 4º Congreso Rosario del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (Iaef) que se realizó en la Bolsa de Comercio, los empresarios analizaron públicamente la marcha de la economía argentina y reconocieron su preocupación en torno a la inflación. Aunque a priori el panel de los hombres de negocios se mostró crítico sobre el rumbo de algunas medidas oficiales, especialmente vinculadas a costos de materias primas y a los mercados agroalimentarios, ninguno pudo desconocer que el modelo económico vigente les permitió expandirse y en ese punto señalaron su intención de seguir invirtiendo en el país.
El presidente de General Motors Argentina, Sergio Rocha, recordó que a mediados de junio presentaron una nueva inversión de 600 millones de pesos para incrementar en un 25 por ciento la producción de vehículos de la firma en la planta de Alvear. Sin embargo, prendió las luces de alerta ante la posibilidad de que "un día el país pierda la competitividad".
Para el titular de la automotriz "Argentina está en el camino equivocado" y señaló: "Tenemos muchas dudas cuando nos controlan los precios".
El directivo de GM expuso, en ese sentido, que "no es que lo que se hace está mal, sino que no concuerdo con el cómo se hace".
Rocha mostró gran preocupación por el incremento del costo de la mano de obra y la pérdida de competitividad ya que "mientras que en 2005 el costo laboral representaba un 28 por ciento hoy alcanza al 52 por ciento". A pesar de estas observaciones dijo que los trabajadores son un eslabón muy importante en la compañía.
No obstante, consideró que las perspectivas económicas para el mercado automotriz son positivas y destacó que hay muchos indicadores que sostienen a la industria pero apuntó: "Somos optimistas, no ingenuos".
Explicó que GM cuenta con un 16 por ciento del mercado, tiene ventas por 2.100 millones de dólares. Para 2011 la automotriz espera incrementar 25 por ciento la producción, de acuerdo al último anuncio de inversión. Fabricará 28.000 autos adicionales -de los modelos Agile y Classic- a los más de 120.000 que produce actualmente en la planta local.
Cooperativistas. Por su parte, Carlos Trevisi, presidente de Agricultores Federados Argentinos (AFA), mostró los números del sector cooperativista al que representa y subrayó que aunque el campo "es castigado por las políticas agropecuarias a nivel nacional se trata de una actividad que piensa en el futuro y siempre seguirá produciendo e invirtiendo".
Tras preguntarse porqué es tan complicada la exportación de carne, trigo y maíz dijo: "Bregamos para que los que están por venir o los que permanezcan lleguen con una política para que volvamos a ser el granero del mundo".
La cooperativa que reúne a productores de más de 120 localidades de 9 provincias armó un plan de cara a 2020 y en la primer etapa que arrancó este año -y es por tres años- se prevé la inversión de 90 millones de dólares. "Estas inversiones que vamos hacer es porque vemos un marco positivo hacia adelante", puntualizó.
Trevisi contó que se trabaja en la formulación agroquímicos inocuos para el productor y menos tóxicos para el medio ambiente. También se ampliará en 800 mil toneladas la capacidad de acopio, hoy en 2,8 millones de toneladas. "Al no poder sacar el grano del país el productor necesita más capacidad de acopio, tenemos los silos llenos con granos de hace dos años y ahora llega la nueva cosecha", indicó el presidente de AFA.
Además mencionó que se apunta fuertemente a procesar a fasón harina de maíz y trigo para sacarle más rentabilidad al grano y en lo referente a las legumbres indicó que hoy la cooperativa es la segunda exportadora de arvejas.
La fuerte inversión prevista por AFA se sustenta en la demanda de alimentos producto del crecimiento demográfico de la población mundial y también a la de biocombustibles. "Después de la catástrofe en Japón se cancelaron muchos proyectos de plantas nucleares, el petróleo tiene un límite y se van a necesitar las energías renovables. Viene un mercado más que interesante para los próximos 10 años y podemos producir alimentos y energía", señaló.
Exportar conocimiento. A su turno, Víctor Trucco, presidente de Bioceres, destacó la importancia de la biotecnología y lo fundamental que es tener una visión de largo plazo, al tiempo que destacó el rol de los biocombustibles. La compañía que nació en 2001 hoy está gestionando 27 patentes, y muchas son de las universidades públicas como las referentes a cultivos tolerantes a sequía. Por eso, el legendario impulsor de la biotecnología destacó la importancia de la asociación público-privada.
El directivo adelantó que en poco tiempo más estará lista la planta de molecular farming, la disciplina que usa a los cultivos como biorreactores para producir proteínas recombinantes y otras moléculas biológicas de interés comercial. El futuro de las enzimas es muy promisorio, transforma las azúcares en energía y hacen al bioetanol más competitivo, de segunda generación.
Desde Bioceres aseguran que se trata de un mercado de 21 mil millones de dólares y en 2011 la Argentina puede convertirse en el primer país en comercializar molecular farming. "El desafío es ir rápido para llegar antes", apuntó Trucco.