El mercado paralelo del dólar sigue tensionado y a la presión alcista se sumó la cotización de la divisa en el segmento ilegal, con una fuerte suba. El vocero presidencial culpó de esa tensión al Congreso y amenazó con que la agitación cambiaria es “una muestra gratis” de lo que puede ocurrir si no aprueban el paquete legislativo que mandó el presidente Javier Milei para su aprobación. Los economistas, en cambio, culpan a la inflación y a las dudas sobre la política del ministro de Economía, Luis Caputo.
En este contexto, el Banco Central volvió a comprar dólares en el mercado oficial. El martes adquirió u$s 128 millones y acumuló un saldo positivo por u$s 832 millones desde inicios de año.
La tensión viene por el lado de los dólares paralelos. En el segmento bursátil, el contado con liquidación (CCL) ofreció cierto respiro al bajar 0,7% a $ 1.193,30, mientras que el MEP ascendió 1,6%, a $ 1.160,38. El blue subió $ 70, a $ 1.120 para la venta en la city porteña.
El dólar mayorista se ubicó en un promedio de $ 814,40 con una suba de cincuenta centavos, con lo que la brecha cambiaria con el CCL se ubicó en torno a 46% y con el MEP, en 41%. La fuerte suba del blue, que rompió la pax cambiaria reinante durante las últimas tres semanas, se reflejó en Rosario, donde llegó a cotizar a $ 1.132.
Joel Lupieri, de Epyca Consultores, consideró que un elemento clave en esta dinámica alcista del blue son las tasas negativas. El 18 de diciembre pasado, el Banco Central (BCRA) decidió bajar el rendimiento de los plazos fijos tradicionales a 30 días al 110% (Tasa Nominal Anual, TNA) desde el 133%, es decir, 23 puntos porcentuales. “Esta medida incita a que los ahorristas busquen otras alternativas de inversión y se vuelquen, más concretamente, a la dolarización, como hemos visto en los últimos días”, señaló.
El economista Pablo Ferrari apuntó también que el crawling peg (ritmo de microdevaluaciones diarias) del 2% mensual en un contexto de alta inflación equivale a un tipo de cambio casi congelado. En la city no descarta que la semana próxima pueda tocar $ 1.200.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, eligió creer o hacer creer que las subas en las cotizaciones de los dólares paralelos son “una muestra gratis” de lo que puede pasar en el mercado de cambios y la economía en general, si el Congreso no aprueba el proyecto de ley de “Bases y puntos de partida para la libertad de los argentinos”.
El portavoz se refirió en su introducción a “alguna repercusión en la cotización de los tipos de cambio”. En ese sentido, citó “las famosas medidas de urgencia del ministro de Economía, Luis Caputo”, con las que, fantaseó, se logró “estabilizar algunas variables de la economía”.
El 12 de diciembre último Caputo anunció varias medidas, entre las que se destacó la devaluación del peso y la fijación de una cotización del dólar oficial en $ 800, además de la aplicación de pequeños ajustes periódicos del 2% mensual.
Luego de que en las primeras semanas de vigencia de esa medida el mercado financiero se desenvolviera con relativa tranquilidad, en los últimos días se puso áspero. Para Adorni, fue fruto de una serie de “rumores”, en una dinámica que atribuyó a lo que puede ocurrir si “la política no acompaña” los cambios planteados por el gobierno.
La Bolsa porteña bajó 4,01% y cortó una racha positiva de cuatro ruedas consecutivas. Con similar tendencia, la mayoría de los papeles de firmas argentinas que cotizan en Nueva York también registraron resultados negativos.
En el segmento de renta fija, los bonos soberanos en pesos marcaron bajas de hasta 4%, mientras que los títulos en dólares reflejaron también descensos de hasta 5,4%.
Reclamo de acopiadores
La Sociedad Gremial de Acopiadores de Granos y el Centro de Acopiadores de Cereales y Oleaginosos de Santa Fe reclaman la intervención del Estado para reglamentar el tipo de cambio a aplicar para la liquidación de operaciones de granos sobre posiciones futuras mientras dure el régimen cambiario especial fijado para la liquidación de divisas de la agroexportación.
Los acopiadores pidieron secretario de Agricultura de Santa Fe, Ignacio Mántaras, que intercedan ante el gobierno nacional para que corrija una distorsión creada a partir del Programa de Incremento Exportador, por la cual se genera “un enriquecimiento sin causa para los compradores y un perjuicio a los productores agrícolas”.