La Administración Nacional de la Seguridad Social (Ansés) informó que las jubilaciones, pensiones y asignaciones tendrán un incremento en agosto del 4,58%, por la fórmula de movilidad que toma como referencia el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de junio publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Además, los titulares de jubilaciones y pensiones con haberes mínimos cobrarán un bono de $ 70 mil, por lo que ningún jubilado o pensionado recibirá menos de $ 295.454,42, resultante de sumar el refuerzo a los $ 225.454,42 de haber mínimo. Quienes tengan haberes inferiores a esa cifra tendrán un bono proporcional hasta alcanzarla.
La Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) será de $ 250.363,54, producto de sumar el haber de $ 180.363,54 con el bono de $ 70 mil. Las pensiones no contributivas por invalidez y vejez llegarán, con refuerzo, a $ 227.818,09.
En tanto, la Asignación Universal por Hijo (AUH) ascenderá a $ 81.010, la AUH por Hijo con Discapacidad, $ 263.791 y la Asignación Familiar por Hijo, $ 40.505 para el primer rango de ingresos.
Índice de salarios
En tanto, el Indec informó que el promedio de salarios subió 8,3% en mayo y quedó por encima de la inflación (4,2%), por segundo mes al hilo. Sin embargo, desde el gobierno de Javier Milei, los sueldos perdieron en promedio 13,1% (entre noviembre 2023 y mayo 2024) de poder adquisitivo, según calculó el Centro de Economía Política (Cepa).
En los primeros cinco meses del año, el promedio de salarios trepó 73,6% y también le ganó al Índice de Precios al Consumidor acumulado entre enero y mayo, que se ubicó en el 71,9%.
Según el Indec, el sector privado registrado obtuvo en mayo un aumento de 7,7%, mientras que el público un 8,3% y el no registrado un 11,8%, siendo este último el que más le ganó al IPC mensual. Sin embargo, en la variación acumulada los estatales y no registrados quedaron 5,2 y 16,4 puntos porcentuales por debajo de la inflación, respectivamente.
Si se considera la variación interanual real de los salarios, se aprecia una caída del 22,3% en el sector público, 8,1% en el sector privado registrado y 32,3% en el sector privado no registrado. “Estos últimos trabajadores son los que más pierden poder adquisitivo desde hace años”, señaló el economista Nadin Argañaraz.
A pesar de ganarle a la inflación, los haberes no logran recuperarse del pico inflacionario de diciembre (25,5%), que dilapidó el poder adquisitivo de los trabajadores. Tal es así, que los salarios del sector no registrado aún están 22,7 puntos por debajo de los de noviembre 2023, mientras que los públicos se encuentran 18,4 puntos y los registrados un 6,5 puntos.
“La desaceleración de la inflación en mayo (4,2%), les dio la oportunidad a los salarios de que con la inercia previa recuperen un poquito. Pero todas las series están en L”, aseguró Hernán Letcher, de Cepa.
El ministro de Economía, Luis Caputo, destacó en su cuenta oficial de X (ex Twitter) que “el nivel general de salarios subió 4% en términos reales”.