El gobierno nacional puso en marcha el congelamiento de precios de 1.432 productos de consumo masivo desde el 1º de octubre al 7 de enero y acordó con las provincias la extensión de las tareas de control. La resolución despertó el malestar de algunos sectores empresarios. La Cámara Argentina de Comercio advirtió que habrá desabastecimiento. El secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, dijo que esa amenaza es “hacia el pueblo argentino”.
La resolución 1.050 es la que dispuso el congelamiento y cuenta con un anexo en el que se listan los productos que no podrán variar de precio en 90 días. Feletti, anunció la decisión de sumar a provincias e intendencias en el monitoreo del programa. También incorporará a las asociaciones de consumidores.
“Estamos previendo los mecanismos legales para que gobernaciones e intendencias acompañen el monitoreo del programa, informen y podamos avanzar en el control”, dijo Feletti quien inició en la ciudad de La Plata la ronda de diálogo con una reunión con el gobernador bonaerense Axel Kicillof e intendentes de la provincia.
Previo a ese encuentro, Kicillof respaldó las medidas que adoptó el gobierno nacional para “darle un ordenamiento a la cuestión de los precios” de la canasta básica y dijo que implica “darle una lógica que tenga que ver con los costos”.
La resolución de la Secretaría de Comercio Interior estableció la “fijación temporal de precios máximos de venta al consumidor para todos los productores, comercializadores y distribuidores” de la canasta de productos de consumo masivo en todo el territorio nacional, en una decisión adoptada tras una serie de reuniones con las empresas de la cadena de producción, distribución y comercialización.
La norma también llamó a las empresas a “incrementar su producción hasta el máximo de su capacidad instalada y a arbitrar las medidas conducentes para asegurar su transporte y provisión durante el período de vigencia de la presente medida”.
Desde el sector empresario, por la mañana el presidente de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), Natalio Grinman, dijo que “va a haber desabastecimiento” a raíz de la medida oficial, al entender que “las empresas no van a fabricar el producto que le provoca pérdida”.
Horas más tarde, a través de un comunicado, la entidad salió a manifestar su “plena vocación de colaborar” con el gobierno nacional y negó que las palabras de Grinman hayan sido una amenaza por parte de las empresas alcanzadas por la fijación de precios de la canasta de productos de consumo masivo.
El contrapunto había espiralizado porque Feletti, a través de su cuenta de la red social Twitter, denunció que “este tipo de amenazas no son a un gobierno ni a una política, sino al pueblo argentino”.
También aseguró que la política de precios tiene como objetivo “bajar el peso de la canasta básica alimentaria en el salario” y agregó: “Yo voy a ejercer la política de precios con este norte”.