Kicillof se quejó porque en el ámbito académico, la "Teoría general del empleo, el interés y el dinero", obra principal del inglés John Maynard Keynes se enseña en forma "filtrada", al punto de reducir el papel del Estado en la economía a una intervención de "sintonía fina para disminuir las oscilaciones de una economía que funciona normalmente". Señaló que esto impide a los nuevos economistas conocer aspectos más profundos de su teoría. "Keynes dice que el motor del capitalismo es la ganancia, la ganancia regula la inversión y la inversión crea empleo. Y decía que esto está supeditado muchas veces al capricho de los empresarios y a sus ideas ridículas sobre el futuro. Por eso, dice que la inversión es demasiado importante para dejarla en manos de los empresarios. Así, al Estado le queda la función de garantizar que los capitalistas inviertan, y si no lo hacen, tendrá que cobrarles los impuestos necesarios para invertir él".