La evolución económica de Argentina, luego de la Primera Guerra Mundial, se
caracteriza porque la tasa de crecimiento del ingreso per cápita fue una de las más bajas del
mundo, al punto tal que el país pasó de pertenecer del grupo de naciones líderes al de los de menor
cuantía. En este trabajo, elaborado por Ieral Litoral Fundación Mediterránea sostenemos que:
1) El proceso de estancamiento secular relativo, que comenzó en algún momento entre 1913 y 1950,
continúa hasta ahora, y
2) La solución es la adopción de un política de desarrollo de largo plazo basada en las teorías
que explican las causas del crecimiento de los países, en la economía globalizada, elaboradas a
partir de mediados de los 80.
Esta mala performance de la economía es tan atípica en el mundo, que el historiador económico y
economista Alan Taylor en 1994 señalaba que el fracaso económico de Argentina es uno de los casos
más enigmáticos de desarrollo nacional y aunque todo el mundo coincide en que el país ha sufrido un
declive económico relativo, pocos se ponen de acuerdo sobre su naturaleza.
El estancamiento secular relativo de la económica argentina continúa, no obstante los períodos
de fuerte crecimiento que se observaron en los 90 y en esta década, según lo demuestran los
siguientes datos estadísticos:
- Ingreso per cápita de Argentina vs ingreso per cápita del mundo. El deterioro secular relativo
de la economía argentina Argentina no se detuvo a pesar de los fogonazos de crecimiento en los 90 y
en 2003/2007. En 1964, el PIB per cápita del país con relación al mundo era 2,11, mientras que en
1990 descendió a 0,78. Pero en 2007, no obstante que fue el pico del fuerte crecimiento observado a
partir de 2003, la relación descendió a 0,76. En otras palabras, en 43 años, la economía argentina
paso de tener un PIB per cápita dos veces y fracción mayor que el PIB per cápita del mundo, a tener
solo 0,76 centavos por cada dólar de PIB mundial.
- PIB per cápita de Argentina versus el PIB per cápita promedio de los países con mayor PIB per
cápita del mundo. Entre 1964 y 1980, la relación con el 10 por ciento de los países más ricos cayó
de 0,43 centavos de dólar a 0,13 en 1990. Pero en 2007 era de 0,12 centavos de dólar, no obstante
que 2007 fue el pico del crecimiento observado a partir de 2003.
- El crecimiento de países de perfil productivo similares como Australia y Canadá y con la
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde). Hasta 1990 Canadá creció más y
Australia en la misma proporción que la Ocde, pero en la Argentina la relación cayó de 0,73 a 0,19.
Entre 1990 y 2007, Argentina mejoró la relación con Ocde mientras Australia desmejoró levemente y
Canadá algo más.
- Comparación con América latina, Brasil, Chile y México. Hasta 1990, el PIB per cápita de Brasil
creció de 0,64 a 1,22 con relación a América latina; el de México creció de 0,94 a 1,28; el de
Chile disminuyó de 1,55 a 1,01; pero el de Argentina disminuyó de 2,61 a 1,44. Entre 1990 y 2007 el
PIB de Chile creció de 1,01 a 1,27; el de México siguió creciendo de 1,28 a 1,46; el de Brasil
descendió de 1,22 a 0,91; pero el de Argentina disminuyó de 1,44 a 0,94.
- La tasa de crecimiento 1990-2007. La más elevada fue la de Guinea Ecuatorial con 26,02
por ciento, y la menor tasa de crecimiento positivo fue la Malawi con 0,02 por ciento. En 14 países
fue negativa, es decir que disminuyó el PIB per cápita. La tasa de Argentina 1990-2007 fue del 2,53
por ciento y ocupó el lugar 167 entre los 220 países sobre los que se da información.
La Argentina está ubicada en el ranking mundial de países de acuerdo al nivel del PIB per cápita
del año 2008 entre el lugar 55 y el 68, de acuerdo a datos del Banco Mundial y el Fondo Monetario
Internacional.
Razones del estancamiento
¿Cuál es la explicación del estancamiento secular relativo? ¿Por qué no
pudo Argentina tener un crecimiento comparable al de mundo en su conjunto y semejante al de los
países que mejor aprovecharon el crecimiento mundial a partir de la década del 60? ¿Por qué no pudo
aprovechar las oportunidades que se abrieron en el mundo para muchos países a partir del proceso de
globalización de la economía que comienza a fines de los 70?
Para explicar las causas de este estancamiento hay que tener en cuenta, y
no es un punto menor, que no hay una respuesta única para todo un proceso de casi un siglo, y que
el crecimiento económico no puede explicarse sólo por variables económicas.
Entre las causas no económicas hay dos que estuvieron presentes a partir de
la década del 40, y que están claramente señaladas en la bibliografía sobre el crecimiento
económico, como prerrequisitos fundamentales para que Argentina crezca.
1) La visión predominante. A partir de la década de los 40 se instala en el
país una visión predominante que sostenía que el comercio exterior no iba a volver a ser el motor
del crecimiento económico, las empresas tomando decisiones en función de los precios relativos no
podrían solucionar los problemas del crecimiento económico, por lo que el Estado debía intervenir
en los mercados corrigiendo precios.
Esta visión fue reforzada por la teoría del deterioro de los términos del
intercambio, de Raúl Prebisch, que sostenía que los frutos del comercio mundial no eran parejos
para los países que comerciaban sino que perjudicaban a los menos desarrollados por el deterioro de
los términos del intercambio.
Quizás el error principal de Prebisch, visto a la luz de los
acontecimientos posteriores, fue su creencia de que las exportaciones de los países
latinoamericanos no podrían volver a crecer como antes de la gran depresión. Esta visión, nunca fue
revisada a pesar que en todas las teorías que explican las causas del crecimiento económico de los
países exitosos, está presente como factor importante el comercio exterior.
2) La cultura predominante. Carlos Moyano Llerena sostenía que la
causa de la pobreza argentina radica en una mala utilización de sus favorables recursos, que están
dedicados a actividades de baja productividad. Ello se debe a que tanto empresarios como
trabajadores buscan el éxito económico no en el esfuerzo competitivo, sino en protecciones privadas
o estatales de diversa índole, esperando lograr así ganancias superiores a las que el mercado
brindaría. La ideología populista prevaleciente apoyó esa conducta.
Pero a la teoría y la cultura dominante se suma un tercer concepto.
3)
Las teorías del crecimiento que desechamos. La explicación del estancamiento secular
relativo de la económica Argentina se completa agregando a la visión y la cultura predominante, el
hecho que sucesivos gobiernos no tuvieron en cuenta a la hora de diseñar sus políticas económicas,
cuales eran las causas que explicaban el crecimiento de los países más exitosos.
Entre las décadas del 60 al 80, ocurrieron cuatro acontecimientos
importantes que influyeron en la orientación académica que tomaría el estudio el crecimiento
económico a partir de mediados de los 80: i) El "milagro asiático"; ii) el fracaso de las economías
planificadas y socialistas; iii) la tercera revolución industrial; iv) la globalización financiera
y económica, que los economistas incorporaron en sus teorías, acerca de las causas del crecimiento
económico, a saber: las instituciones; las ventajas competitivas; las externalidades; el fenómeno
de la concentración económica; la estructura científico-técnica; la infraestructura física y
humana; la vinculación entre el medio ambiente y el desarrollo económico, el desarrollo
sustentable, crecimiento y pobreza y la vinculación entre el crecimiento económico y el gasto
público.
La persistencia del estancamiento secular relativo de Argentina consiguió
un crecimiento económico sostenido después de la segunda guerra mundial, y desde el inicio de la
globalización. Eso permite afirmar que existen políticas que permiten crecer y que Argentina no
aplicado una buena combinación.
El ejemplo mas reciente es la política que se aplicó desde 2003. En primer
término se adoptó la visión que la economía mundial es un problema y no una oportunidad para el
crecimiento, y se dedicó exclusivamente a tratar de agrandar el mercado interno, cosa que se logró
mientras el producto crecía a influjo de un aumento excepcional en los precios de en nuestros
productos de exportación.
En segundo lugar se adoptó la misma "cultura" que Moyano Llerena
describiera sobre la causa de la pobreza argentina (explicada anteriormente). Ambas poseen un
descreimiento total del rol del mercado en la determinación de los precios relativos de las
economías y lo suplantaron por decisiones arbitrarias, tomadas sin tener en cuenta que cada vez que
se fija el precio de un bien se genera la necesidad de fijar varios más, y sin tener en cuenta las
consecuencias de las decisiones tomadas.
(*) Titular Ieral Litoral