La batalla de la inflación está a full. La Secretaría de Comercio Interior imputó ayer a once grandes firmas proveedoras de artículos de consumo masivo de retener volúmenes de producción o falta de entrega, tras encontrar desabastecimientos puntuales en supermercados y comercios. Desde la calle, los movimientos sociales lanzaron una campaña para controlar el cumplimiento de los acuerdos de precios. Rosario fue sede de una de las concentraciones. Desde la política, el ministerio de Desarrollo Productivo definió que la semana próxima comenzarán las reuniones sectoriales con las industria de la construcción, alimentos y tecnología, convocatoria que se prevé para la semana próxima.
El mismo día en que se conoció que la canasta básica de precios aumentó 4,2%, el gobierno imputó a las firmas Mastellone, Fargo, AGD, Danone, Molinos Cañuelas, Bunge, Molinos Río de la Plata, Unilever, P&G, Paladini y Potigian por retener volúmenes de producción o demorar la entrega de determinados productos de consumo masivo para su comercialización.
La acción se realizó “luego de verificar que estas empresas habrían incumplido la intimación a incrementar su producción hasta el más alto grado de su capacidad instalada y arbitrar los medios a su alcance para asegurar su transporte y distribución con el fin de satisfacer la demanda, establecida por la resolución 100/2020”, informó Comercio Interior en un comunicado.
Al término de la reunión del gabinete económico, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, aclaró que si bien el gobierno nacional apuesta por el diálogo, esa actitud “no reemplaza la potestad del Estado de aplicar las leyes vigentes”. Explicó que la investigación se inició ante denuncias de “desabastecimientos puntuales de algunos productos”. También señaló que las compañías tienen posibilidad de descargo.
Varias de las firmas imputadas respondieron que todavía no recibieron ningún aviso oficial al respecto. La secretaria de Comercio Interior, Paula Español, informó que las imputaciones se llevaron adelante tras encontrar “faltantes en góndolas en productos como aceites, aderezos, arroz, lácteos, pan lactal o detergentes, entre otros”. Y aseguró que la acción se ampara en la resolución 100 del año pasado, que establece el marco legal para la implementación de Precios Máximos.
En cada empresa se presentaron problemáticas distintas, como la fuerte y súbita caída en el inventario de aderezos, la disminución relevante en la producción y despacho de quesos cremas y postres, la baja en el stock de varias presentaciones de productos de marcas emblemáticas de pañales y detergentes y la reducción en el stock de diversas presentaciones de ravioles y ñoquis y de pan lactal. Otras empresas fueron multadas porque “no aportaron la información con el detalle requerido para realizar un análisis completo de imputadas por este motivo”.
En paralelo a la acción del Estado, movimientos sociales lanzaron en todo el país la campaña “Organización Comunitaria para Cuidar el Bolsillo”. En su inicio, realizaron concentraciones en algunos supermercados de todo el país. En Rosario, militantes de Somos Barrios de Pie, Movimiento Evita y la Corriente Clasista y Combativa se concentraron en el Carrefour de Pellegrini y Vera Mujica. “Acompañamos esta decisión del gobierno de instalar los precios cuidados, entendiendo que es un paliativo que ayuda para que la gente pueda tener alimento a precio más barato”, dijo Eduardo Delmonte, referente de la CCC.
Mientras tanto, el gobierno nacional avanza con la convocatoria a mesas sectoriales para negociar un acuerdo sobre precios y salarios. En la reunión de gabinete económico que se realizó ayer se decidió que la convocatoria a las mesas sectoriales para analizar las distintas cadenas de valor se realizará la semana entrante.
“Vamos a comenzar con la reunión de la cadena de alimentos, tomando como punto de partida las mesas que ya están conformadas en el Ministerio de Agricultura, entre ellas las que vienen trabajando los casos del trigo y del maíz”, destacó el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas. El cronograma seguirá con las industrias de la construcción y la tecnología.
Medicamentos
La Cámara Industrial de Laboratorios Farmacéuticos Argentinos (Cilfa) aseguró que los precios de los medicamentos crecieron 31,1% en 2020, por debajo de la inflación. De esta manera, cruzó un trabajo de la Unión Argentina de Salud (UAS), que sostuvo que los productos de uso hospitalario aumentaron 278% promedio.