"Hay triple imposición sobre los inmuebles"

"En Rosario existe una triple imposición sobre los inmuebles", señaló ayer el analista tributario Enrique Lingua, a la hora de hacer un análisis sobre el revalúo catastral que implementó la Municipalidad y que impactará concretamente en un aumento de la tasa general de inmuebles (TGI).

  La medida fue cuestionada por ediles de la oposición y tildada de "aberración jurídica" en función de que actualiza valores de terrenos y propiedades para el cobro de una tasa que se aplica a servicios y mejoras.

  En ese sentido, Lingua consideró que tanto la Municipalidad como la provincia tienen la facultad de aplicar una medida de estas características y de hecho lo hicieron a lo largo de todos estos años. Sin embargo, señaló que "hay que reconocer que se trata de la aplicación de un impuesto y no de una tasa", dijo.

  "El órgano recaudador siempre tiene facultades para hacer valuaciones, pero el pago tiene que estar relacionado con la efectiva contraprestación del servicio", dijo Lingua y agregó: "Ahora ajustan el importe de la valuación del inmueble para recaudar más tasa sin que ello implique mayor contraprestación".

  Por otra parte, dijo que en este caso, la Municipalidad legisló "como si se tratara de un impuesto", una potestad que adoptan muchos otros municipios cuando cargan contra la circulación de vehículos o las tasas portuarias para destinarlas a obras de infraestructura y demás.

  Ahora, "si se tergiversa la cuestión de la tasa se convierte en un impuesto y se superpone con los nacionales y provinciales", dijo el analista. De este modo, para Lingua, en Rosario "el inmueble está alcanzado por tres niveles: por un lado gravado con bienes personales por la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip), con el inmobiliario por la provincia (a través de la API) y por la TGI por la Municipalidad.