El gobierno y los empresarios volvieron a manifestar ayer opiniones diferentes en cuanto al impacto que podría tener en las tarifas de los servicios públicos una reducción o eliminación de los subsidios que se vienen aplicando.
El gobierno y los empresarios volvieron a manifestar ayer opiniones diferentes en cuanto al impacto que podría tener en las tarifas de los servicios públicos una reducción o eliminación de los subsidios que se vienen aplicando.
Desde el oficialismo se reiteró la postura expresada la semana pasada por el ministro de Planificación, Julio de Vido, cuando aseguró en una conferencia de prensa que no habrá incrementos tarifarios, aunque desde el sector privado se advirtió que el aumento de costos que implicaría una baja en los subsidios se trasladará a los valores de venta a los consumidores.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, defendió ayer el recorte de subsidios al afirmar que "muchos empresarios" consideran que éste debe ser "uno de los objetivos a seguir" y remarcó que De Vido "dijo que las tarifas no van a aumentar".
El funcionario insistió en que el recorte de aportes del Estado "en algún momento tenía que empezar".
En el mismo sentido se expresó el secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, quien negó un aumento tarifario en el servicio público de transporte, aunque admitió que el gobierno está estudiando el esquema de subsidios a ese sector.
"Nadie en ningún momento habló de un aumento tarifario en relación al transporte", aseguró Schiavi.
"¿Estamos estudiando (el sistema de subsidios)? Lo estamos estudiando. Ahora de ahí a mensurar que vamos a sacar el subsidio al transporte, vamos a cambiar la estructura de tarifas, nadie lo dijo, nadie lo hizo, ni nadie lo está estudiando en profundidad en este momento", aseveró.
Por el contrario, el ex presidente de la Unión Industrial Argentina, Héctor Méndez, advirtió que "si tenemos aumentos del 300 por ciento en la energía de las plantas, eso va a pasar al costo e inevitablemente lo va a pagar la gente".
"Es bueno que se blanquee el tema de los subsidios pero es de esperar que no lo pague la industria, que es la que motoriza todo", añadió el dirigente fabril.
Asimismo, el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), Osvaldo Cornide, aseguró que el subsecretario de Coordinación y Control de Gestión del Ministerio de Planificación, Roberto Baratta, le comentó que la eliminación de los subsidios que lleva adelante el gobierno "será gradual y paulatina" y que no está previsto convocar a las centrales empresarias para discutir el tema.
A través de un comunicado de prensa, Came salió al cruce de las declaraciones formuladas días atrás por el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), José Ignacio de Mendiguren, quien había asegurado que Baratta le anticipó que lo convocaría para informar a la entidad que encabeza acerca de los cambios en la política de subsidios resuelta por el gobierno.
El Ejecutivo dispuso la semana pasado la eliminación de los subsidios de agua, luz y electricidad que tenían los bancos y servicios financieros; los seguros; los juegos de azar; los grandes aeropuertos; las terminales portuarias; la telefonía celular y actividades extractivas de minería e hidrocarburos.
El anuncio -que fue realizado por los ministros de Economía, Amado Boudou, y de Planificación, Julio de Vido- implica un ahorro fiscal de 600 millones de pesos y constituye el primero de una serie de recortes que aplicará el gobierno en materia de subsidios.