El secretario de la Cámara de Empresarios de Combustible, Raúl Castellanos, aseguró ayer que los precios de las naftas y el gasoil volverán a aumentar a principios de septiembre por el ajuste que está mostrando el valor del dólar y por un alza en los impuestos.
"Estamos ante una sucesión de aumentos relativamente grandes, ya hubo alzas de precios nueve veces en lo que va del año, con lo que estamos marcando un récord; la última fue este domingo de 0,8 por ciento las naftas y 0,9 por ciento el gasoil", dijo Castellanos.
Con esos ajustes, YPF acumula alzas el 5,3 por ciento en nafta súper y del 6,3 por ciento en la premium, y en el caso del gasoil del 6,1 por ciento y del que tiene mayor calidad del 6,45 por ciento.
Castellanos explicó que, según informaron las petroleras a los estacioneros, el ajuste de este último fin de semana respondió a la incidencia del aumento de los biocombustibles, dado que con ellos se cortan las naftas y el gasoil al 10 por ciento.
El empresario estimó que un mercado totalmente liberado, en algún momento debería alcanzarse un "precio de equilibrio" para los combustibles que permita a las petroleras bajar los valores de expendio cuando desciende el barril de crudo.
"Tendría que ocurrir una baja en los precios, pero se está ante una incertidumbre y desconocimiento acerca de cual sería el precio de equilibrio, después de la suba del petróleo y el dólar", apuntó Castellanos en declaraciones a radio La Red.
Por otro lado, Castellanos sostuvo que la diferencia de precios ue existe entre la Capital Federal y el interior del país no tiene justificaciones económicas, porque no tiene que ver con el flete ni con la carga impositiva y se trata sólo de "políticas comerciales de las compañías petroleras".
"Nosotros los estacioneros no entendemos esa política comercial, porque no existe justificación para que haya una diferencia de precios del 12 por ciento entre la Ciudad de Buenos Aires y el resto del país", expresó.
El precio promedio de la nafta súper es de 34 pesos en el país y de 26,90 pesos en la Capital Federal, dijo el secretario de la cámara.
En línea con lo expresado por Castellanos, las petroleras ya tienen decidido otro incremento de precios para el 1º ó 2 de septiembre.
Ocurre que el 1º de septiembre aumentará el valor de los impuestos que gravan a las naftas y gasoil en alrededor de un 9 por ciento, lo que significará 60 centavos más por litro de nafta y 40 centavos más por litro de gasoil.
A esto habrá que sumarle lo que las petroleras quieran recuperar de la última devaluación y lo que se tomarán de lo que consideran adeudado.
En lo que va de 2018, la nafta súper ya acumula un avance del 32,4 por ciento, 12,5 puntos porcentuales más que lo que subió el nivel general del Indice de Precios al Consumidor (IPC).
La semana pasada, desde Rosario, donde participó del precoloquio de Idea, el presidente de Shell Argentina, Teófilo Lacroze, había adelanado una nueva suba en los combustibles, y argumentó que los precios del sector están atados "a las variaciones del tipo de cambio".
Esta carrera alcista no cesa. Pese a la liberación total del precio de los combustibles, la importación se mantiene. El gasto en compras de nafta y gasoil extranjeros ascendieron de 503,8 millones de la moneda estadounidense a 751,3 millones entre el primer semestre de 2018 y el mismo período de 2017. La diferencia fue de 247,5 millones de pesos.
Desde la asunción del nuevo ministro, Javier Iguacel, solamente en junio las erogaciones por importaciones de nafta y gasoil crecieron 55 por ciento en relación al mismo mes del año pasado. En dólares, saltaron de 92,6 millones a 143,5 millones.