El dólar alcanzó ayer su mayor valor en 12 años frente al euro y su mayor nivel frente al yen japonés en casi ocho años, impulsado por el programa de compra de bonos del Banco Central Europeo (BCE) y las expectativas de un alza de tasas de la Reserva Federal a mitad de año.
El nuevo récord de la divisa estadounidense impactó en los mercados financieros, bursátiles y de commodities de nivel global. En Wall Street, el índice Dow Jones perdió 1,85 por ciento y el Nasdaq 1,67 por ciento. Las Bolsas euorpeas cayeron, encabezadas por Londres, que bajó 2,5 por ciento. En este contexto, el Merval porteño retrocedió 2,18 por ciento.
El índice dólar, que mide el desempeño de la moneda estadounidense frente a una canasta de divisas, alcanzó su mayor nivel desde septiembre del 2003, mientras que el euro tocó un mínimo de 1,06925 dólares. El euro también tocó su punto más bajo frente al yen desde agosto del 2013, en 129,480 yenes.╠
El lanzamiento del programa de alivio cuantitativo del Banco Central Europeo, lanzado el lunes pasado, hizo caer los rendimientos de la deuda europea y debilitó al euro. Una nota de investigación de Deutsche Bank pronosticó el martes que el euro alcanzaría la paridad con el dólar a fin de año, 90 centavos de dólar en el 2016.
La apreciación de la divisa estadounidense también le permitió batir un récord frente al yen, que cotizó a 122,40 unidades por dólar, la mayor diferencia desde julio del 2007. También ensanchó la brecha en los mercados emergentes. La divisa estadounidense alcanzó los 15,6452 pesos mexicanos, su mayor nivel desde 1989, y los 3,1722 reales, su punto más alto en casi 11 años.
Mientras Europa y Japón lanzan medidas de expansión monetaria para depreciar su moneda, Estados Unidos, que ya desactivó su programa de recompra de bonos, mantiene una senda expansiva. En ese marco, su dinero se revaloriza y crecen las posibilidades de que la Reserva Federal de ese país decida un aumento de las tasas de interés.
Estos cambios en la geoeconomía mundial impactan tanto en los países industrializados como en los emergentes. "El dólar se beneficia de los resultados mejor de lo esperado del informe sobre empleo en Estados Unidos en febrero que ha reavivado las expectativas de los inversores de que la Fed podría subir las tasas ya a partir de mediados de este año", dijo el economista Derek Halpenny del Bank of Tokyo-Mitsubishi UFJ. Mientras tanto, el rendimiento de los bonos de deuda a 10 años de Alemania, España e Italia alcanzaron nuevos mínimos históricos ante el programa de compra de deuda del BCE.
Las monedas de los emergentes, en cambio, seguían derrumbándose. "Estamos viendo las mayores debilidades en algunos de los mercados emergentes familiares como Sudáfrica, Turquía y Brasil", dijo William Jackson, un economista de mercados emergentes de Capital Economics.
Los períodos prolongados de fortaleza del dólar fueron sinusuales durante las cuatro décadas desde que comenzó la era de tipos de cambio flexibles, pero han contribuido a causar problemas. Más notablemente, en 1997-1998, muchos países asiáticos y Rusia se vieron forzados a devaluar dramáticamente, e incluso algunos incumplieron pagos de la deuda.
El real brasileño se desplomó al menor nivel en más de una década mientras que el rand sudafricano se hundió al mínimo en 13 años y la lira turca se negoció al menor valor histórico registrado el viernes pasado.
El índice referencial de las acciones de todos los mercados emergentes perdió 1,3 por ciento en su octava sesión consecutiva de bajas.
Lebac
El BCRA absorbió ayer $ 1.794 millones, en una licitación en la cual los plazos más largos de vencimiento absorbieron el 39% de la oferta. El mercado respondió a la apuesta de bajar levemente los rendimientos.