El gobierno nacional salió ayer por varios frentes a poner a un techo a la discusión salarial paritaria de este año. Desde España, el presidente Mauricio Macri aseguró que "las paritarias son libres y cada uno acordará en su sector", en el marco de la disputa salarial entre docentes y la provincia de Buenos Aires, pero pidió tener en cuenta la pauta oficial de inflación.
"Las paritarias son libres y cada uno acordará en su sector qué es lo que decida. De por sí, lo que le ofreció la gobernadora (María Eugenia Vidal) a los docentes de la provincia de Buenos Aires es un 18 por ciento, que ya es un punto arriba de la meta que fijó el Banco Central", resaltó Macri.
El mandatario dijo además que la "cláusula gatillo" que ofreció el gobierno de Buenos Aires a los docentes para que en caso de que la inflación supere las previsiones, haya una nueva recomposición salarial, "es algo muy sano, porque nadie quiere reducir el salario real".
Macri sostuvo también que "el principal obstáculo" que tiene la economía argentina "es la inflación, que es algo que perturba, que estafa siempre a los que menos tienen y que no permite una sana competencia", y aseguró que reducirla "fue un objetivo central desde el primer día".
En la misma línea, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, dijo que de parte del gobierno habrá "cero injerencia y tiene que haber responsabilidad de ambas partes, de las empresas y de los sindicatos".
Advertencia
Por otra parte, Dujovne dijo que en el gobierno estarían "encantadísimos de que las subas salariales sean altas" en el sector privado, pero apeló a la prudencia al plantear que siempre y cuando "las empresas lo puedan pagar y no termine generando problemas de empleo".
Al respecto, Dujovne advirtió que hay "un rol importante de los empresarios" porque "si terminan cerrando niveles que no pueden pagar, después vienen a decir que los costos laborales son muy altos y quieren que les arreglemos los problemas con la macroeconomía".
En el caso de las negociaciones salariales en el sector público, el ministro dijo que el ajuste dependerá de "lo que el Estado piensa que puede pagar" y de la pauta inflacionaria del Banco Central.
"La paritaria docente depende de los estados provinciales, y si tienen las finanzas ajustadas, piensan que no pueden superar la pauta inflacionaria porque no tienen fondos genuinos para afrontar un pago superior a ese", explicó.
El presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, deslizó ayer que los gremios deberían confiar en que se cumplirá la meta inflacionaria prevista para este año y negociar salarios en consecuencia, sin tener en cuenta la suba generalizada de precios de 2016.
"El anuncio por parte del Banco Central de sus metas y la determinación de sus acciones en pos de cumplirlas permite que todos tomemos nuestras decisiones con ese elemento sobre la mesa, y tomar a partir de esa base nuestras decisiones de precios y salarios", dijo el banquero.
Mal presagio. Sturzenegger habló en el almuerzo del Iaef y vaticinó meses complicados en materia de precios.