El gobierno nacional analiza la posibilidad de dar forma a una nueva reglamentación para extender la vigencia del decreto que congela los precios de los alquileres y prohíbe los desalojos, cuyo vencimiento está previsto para el próximo 31 de enero. Desde el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat informaron ayer que la prórroga “se está evaluando” y que “se está trabajando en conjunto con Jefatura de Gabinete en la reglamentación”, aunque sin brindar más precisiones sobre cuál puede ser el nuevo plazo de vigencia.
Entre las medidas económicas que se tomaron el año pasado por la pandemia de la Covid-19, se implementó el congelamiento de alquileres y la suspensión de desalojos, así como el congelamiento de las cuotas de los créditos hipotecarios UVA.
La medida vigente en la actualidad, que recae sobre los inmuebles destinados a vivienda única y que se encuentren ocupados, vence el 31 de enero, y establece también la extensión de los contratos de locación cuyo vencimiento haya operado desde el 20 de marzo pasado en adelante.
De este modo, no podrán aplicarse intereses ni otras penalidades previstas en el contrato, tanto para el pago de la diferencia entre la cuota que hubiere debido abonarse según las prescripciones contractuales y la que efectivamente deberá pagarse por la medida, como para el pago de deudas.
Endeudados
Según una encuesta de la Federación de Inquilinos Nacional realizada en el último mes de 2020, el 40% de los inquilinos registran deudas. En este contexto, el organismo reprobó que “el gobierno evalúe extender el decreto sólo un mes más, es como un aviso a cientos de familias endeudadas de que tienen que ir armando los bolsos”, dijo Gervasio Muñoz, presidente de la Federación, en declaraciones radiales.
“Es la confirmación de que habrá cientos de miles de familias desalojadas el 1º de marzo; hay que extender mucho más la suspensión de desalojos y aumentos de precios”, remarcó el dirigente. Y obsevó que “mientras los países suspenden desalojos hasta septiembre y brindan ayuda económica para saldar las deudas de alquileres, aquí se toman medidas de corto plazo”.
"El 40% de los inquilinos registraron deudas durante 2020, según una encuesta de la Federación Nacional "El 40% de los inquilinos registraron deudas durante 2020, según una encuesta de la Federación Nacional
En tanto, desde el Frente Nacional de Inquilinos, organización a la que adhiere la Concejalía Popular de Rosario, se exige al gobierno medidas urgentes como la prórroga de la suspensión de desalojos y judicialización, del congelamiento de los alquileres y de la vigencia de los contratos; la atención especial a los deudores inquilinos con un programa Ahora 12/24 para financiar moras y la mediación obligatoria, jurídica o institucional gratuita en todos los conflictos inherentes a contratos de locación, entre otras medidas planteadas.
Hipotecados UVA
Por otra parte, está planteada la situación de los créditos hipotecarios UVA, cuyas cuotas se encuentran congeladas también hasta el 31 de enero. Desde el colectivo de hipotecados afirman que, de liberarse, el incremento rondaría el 50% en febrero. Desde Hipotecados UVA señalaron que “la usura UVA es insostenible” y que necesitan ser escuchados. “Esta línea de créditos fue uno de los grandes fracasos de la gestión anterior y pedimos que se revea la situación”, dijeron.
Alquilar en Rosario
Por otra parte, el costo de alquilar un departamento de dos ambientes en Rosario creció 61,1% en los últimos doce meses, mientras que para unidades de tres, el aumento fue de 58,3% y para los monoambientes de 43,3%, indicó ayer el Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (Ceso).
Si bien rige el decreto de congelamiento, esta medición tiene en cuenta los valores que debe afrontar un inquilino que decide comenzar a alquilar en comparación con los precios que pagaba quien lo hacía hace un año atrás.
El informe de Ceso precisó que la mediana del precio de monoambientes y departamentos de dos ambientes ofertados en Rosario es de $10.750, mientras que los de tres es de $ 19.000, todos valores que no incluyen expensas, las cuales alcanzan en promedio el 17% del costo de alquiler.
De este modo, “un inquilino que vive en un monoambiente, y desea mudarse a un departamento de un dormitorio debe gastar en alquiler $3.750 más, mientras que para mudarse a uno de dos dormitorios deberá pagar $4.500 adicionales”, detalló Ceso.
Por supuesto que en cada categoría, los precios varían en función de ubicación, comodidades y servicios.
Con estos precios, el trabajador que cobra el haber mínimo debe destinar el 56% de su ingreso para afrontar un alquiler, mientras que el que percibe el Salario Mínimo Vital y Móvil destina el 52% de su ingreso al pago de este servicio si alquila un monoambiente.