La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, advirtió que la economía global "atraviesa un momento delicado" y se encamina a una desaceleración.
La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, advirtió que la economía global "atraviesa un momento delicado" y se encamina a una desaceleración.
La funcionaria afirmó que la economía mundial continuó perdiendo ímpetu en el primer trimestre, por lo que se reducirán las perspectivas globales por debajo del 3,5 por ciento estimado para este año.
En su discurso en la Cámara de Comercio de EEUU, Lagarde recordó que en enero, el FMI proyectó un crecimiento mundial para 2019 y 2020 de alrededor del 3,5 por ciento, "más bajo" del que se ha visto en los últimos tiempos, de acuerdo al Fondo Monetario.
"Desde entonces, el crecimiento ha seguido perdiendo ímpetu", agregó Lagarde.
Explicó que hace sólo dos años, el 75 por ciento de la economía mundial experimentó un repunte. "Este año, prevemos que el 70 por ciento de la economía mundial experimente una desaceleración", alertó la directora gerente del organismo multilateral.
Como causas de esta desaceleración global, Lagarde le apuntó "al aumento de las tensiones comerciales y al endurecimiento de las condiciones financieras registradas durante el segundo semestre de 2018".
En concreto, se refirió a la disputa comercial entre los Estados Unidos y China, desencadenada por la agenda de proteccionismo lanzada por el presidente estadounidense, Donald Trump, y que provocó la suba de aranceles a centenares de productos chinos y también represalias similares por parte de Beijing.
Mencionó como ejemplo que, según los cálculos del Fondo, si los aranceles a todos los bienes que intercambian Estados Unidos y China aumentaran 25 puntos porcentuales se reduciría el PBI anual en un 0,6 por ciento en EEUU y en 1,5 por ciento en China.
Menor comercio
Por su parte, la Organización Mundial de Comercio (OMC) informó ayer en Ginebra, Suiza, que el comercio global crecerá 2,6 por ciento interanual en 2019, cuatro décimas menos que en 2018.
No obstante, la OMC considera que "si se alivian las tensiones comerciales" los intercambios "podrían repuntar y aumentar 3 por ciento en 2020".
El conflicto arancelario entre las dos mayores economías mundiales, China y EEUU, y las dudas en Europa por el Brexit son factores de esa desaceleración, destacó en la presentación de las previsiones el director general de la OMC, Roberto Azevedo.
"El comercio no puede desempeñar plenamente su función de impulsor de crecimiento" a causa de esas tensiones, añadió el responsable de la OMC, organización que prevé un aumento del 2,6 por ciento en el PBI mundial tanto en 2019 como en 2020, frente al 2,9 por ciento registrado en 2018.
Según el análisis de la OMC, en 2019 y 2020 "seguirán soplando fuertes vientos en contra" del comercio mundial, que, a juzgar por las proyecciones, afectará más a los países desarrollados, cuyos intercambios crecerán por debajo del promedio (sus exportaciones aumentarán 2,1 por ciento en 2019 y 2,5 por ciento en 2020).
Para los países en desarrollo, impulsados por potencias emergentes como China, India o Brasil, se estima que las exportaciones crecerán 3,4 por ciento interanual en 2019 y 3,7 por ciento en 2020.
Peor que la subprime
El escenario más pesimista predice que una guerra comercial total entre EEUU y China, los dos mayores exportadores e importadores globales, podría provocar que el PBI mundial cayera 2 por ciento y el comercio 17 por ciento en 2022.
Esas cifras serían incluso peores que en la crisis financiera global de 2008, que generó una contracción de los intercambios mundiales del 12 por ciento en 2009 y una reducción del 2 por ciento en el PBI mundial.