El dólar cerró ayer sin cambios respecto del jueves, en 19,85 pesos para la venta minorista y aplacó la escalada alcista de comienzo de la semana. De todos modos, la divisa acumuló un avance de 56 centavos desde el viernes pasado. En Rosario cerró plano, a 20,05 pesos.
En el segmento informal el dólar recortó un centavo y quedó en 19,56 y 19,96 pesos para las puntas compradora y vendedora respectivamente.
El dólar mayorista avanzó un centavo y quedó en 19,47 pesos para la compra y 19,57 pesos para la venta.
"Sin participación de los bancos oficiales en el desarrollo de las operaciones, el tipo de cambio se mostró más estable y con un leve equilibrio entre la oferta y la demanda", explicó Gustavo Quintana, operador de PR Corredores de Cambio.
"El mercado de cambios va asimilando el nuevo valor de la divisa, ya que, si bien por momentos se vieron en pantallas ofertas de volúmenes de hasta 50 millones de dólares para comprar, y de unos 25 millones para vender en otros momentos, solo se pactaba en los bancos las necesidades de sus obligaciones, sin tomar nadie posiciones que no fueran las necesarias", agregó Fernando Izzo, analista de ABC Mercado de Cambios.
Izzo señaló que "el mercado de dinero entre bancos- operó estable a una tasa promedio del 26,75 por ciento, mientras que en el mercado secundario de Lebacs la tasa que se pagó al plazo más corto promedió el 27 por ciento.
El volumen negociado en el segmento de contado fue de 934,4 millones de dólares; en el de futuros del MAE se hicieron 6 millones de dólares y en el de futuros del Rofex se operaron 742 millones de dólares, de los cuales más del 50 por ciento se operó entre fin de enero a 19,61 pesos y febrero a 19,93 pesos. El plazo más largo fue junio a $ 21,24. Los plazos quedaron con leves bajas de poco más de dos centavos.
A mitad de rueda, el dólar había cedido hasta $19,81 por una mejora en la oferta, pero con el correr de las horas la demanda repuntó e impulsó un cierre prácticamente estable respecto del jueves.
El ministro de Producción, Francisco Cabrera, aseguró ayer que no está preocupado por la suba del dólar. Desde Francia, el funcionario destacó: "Creo que la decisión importante fue la que se tomó cuando Federico Sturzenegger y Nicolás Dujovne hicieron la conferencia de prensa, que tuvo que ver con un cambio en las metas de inflación y esto hizo que se modificaran las tasas del Banco Central".
"Nosotros sabíamos que esto de alguna manera iba a producir una apreciación del tipo de cambio", reconoció el ministro en declaraciones radiales.
Además, admitió que los fuertes aumentos en la moneda norteamericana "generan "volatilidad y cierto nerviosismo".
Sin embargo, aclaró que "a veces la volatilidad es buena para que no haya ganancias financieras extraordinarias".