El directorio del Banco Central de la República Argentina (BCRA) aprobó ayer un nuevo instrumento para incentivar a que los productores agropecuarios vendan su cosecha de soja antes del 31 de agosto próximo.
El directorio del Banco Central de la República Argentina (BCRA) aprobó ayer un nuevo instrumento para incentivar a que los productores agropecuarios vendan su cosecha de soja antes del 31 de agosto próximo.
Quienes comercialicen sus granos hasta el final del próximo mes podrán depositar en cuentas a la vista el 70% del producido de esa venta y recibir una retribución diaria atada al dólar link. Esta cotización mayorista está establecida en la comunicación A 3.500 de la autoridad monetaria.
Por el 30% restante se permitirá la Formación de Activos Externos (FAE), al valor del dólar oficial más el impuesto País y las retenciones a cuenta que percibe la Afip. Es decir que podrán comprar dólar ahorro, a una cotización que ayer rondó los $ 226,05 unos $ 100 más baratos que los paralelos.
El Central dijo que esta decisión busca equilibrar a los productores agropecuarios con los beneficios que disponen otros sectores productivos, como la industria, que dispone libremente de divisas por el incremento de las exportaciones que se realicen respecto del año anterior, el régimen de fomento de inversión para la exportación de energía y el sistema que permite aplicar parte del incremento de las exportaciones al pago de la masa salarial en el caso de la industria del conocimiento.
El nuevo régimen para los sojeros estará disponible hasta el 31 de agosto próximo. Durante ese lapso, los productores podrán adquirir divisas de libre disponibilidad por 30% de los fondos obtenidos por la venta de granos con destino a la exportación y convertir 70% en un depósito de libre disponibilidad con retribución variable en función de la evolución del tipo de cambio oficial”, señaló el BCRA.
Según explicaron fuentes del Banco Central, el régimen de liquidación de granos busca reconocer el valor en divisas que tiene el activo (soja en este caso) y despejar la incertidumbre respecto de una devaluación, “que está instalada en los distintos actores económicos”.
“El objetivo es destrabar la amenaza de un sector que pensaba que había que bajar retenciones y hacer un dólar chacarero”, señalaron las fuentes, que, aseguraron, la medida está “muy hablada con los bancos y el mercado de capitales” y que, en caso de funcionar satisfactoriamente, “podría hacerse extensible a otros sectores exportadores”.
Para poner un ejemplo del funcionamiento de la medida: en una venta de $ 1 millón en granos de soja, el productor podrá hacer un depósito por $ 700.000 que estará retribuido por la evolución diaria del dólar oficial. Con los $ 300.000 restantes, podrá adquirir alrededor de u$s 1.327 dólares al “dólar ahorro”, tomando como referencia la cotización de ayer.
La ventaja para el productor es que esos dólares son de libre disponibilidad: pueden dejarlos en el banco, retirarlos o usarlos para comprar insumos o hacer cualquier operación financiera habilitada.
Actualmente el productor tiene como alternativa realizar un depósito por el total de la venta en plazo fijo chacarero (mínimo a 30 adías), que también se actualiza por el dólar A 3500, aunque la disponibilidad de esos fondos está condicionada por el plazo al que se realizó.
En cambio, con esta nueva disposición pueden realizar el depósito y tener la remuneración y disponibilidad de forma inmediata.
“Tiene la ventaja de no asumir los riesgos de mantener la cosecha en los campos y poder aprovechar cualquier oportunidad de negocios por la disponibilidad inmediata y automática de los fondos, la estructura de este régimen considera prácticas comerciales y de ahorro tradicionales de la actividad”, aseguraron las fuentes.
De acuerdo a distintas estimaciones, las autoridades del BCRA cifran en unos u$s 10.000 millones la cosecha de soja que fue vendida que se encuentra sin fijar precio aún y que, por lo tanto, permanece acopiada a la espera de efectivizarse la operación.
“Para el Banco Central significa la posibilidad de anticipar el ingreso de divisas a la economía con un saldo económico neutro, ya que maneja el valor del dólar A 3.500 en el que se podrán constituir los depósitos, mientras que la Afipo podrá recaudar el impuesto país y la retención a cuenta de Ganancias, en las operaciones de compra de divisas”, detallaron desde la entidad que preside Miguel Pesce.
Los números que maneja el oficialismo es que en el octavo mes del año el campo podría aportar de la mano de este estímulo alrededor de u$s 4.000 millones, cifra récord para ese período y que servirá de puente para los meses que siguen. En tanto, a partir de septiembre, la estimación oficial es que las ventas de soja continuarán a ritmo constante ya que los agricultores necesitarán fondos para encarar la próxima siembra de la oleaginosa.
El ministro de Agricultura de la Nación, Julián Domínguez, aseguró que no habrá devaluación ni baja de retenciones y le pidió al sector agroexportador que liquide los agrodólares “en función de los precios internacionales que tiene la soja”. El funcionario advirtió que la comercialización de la cosecha tiene un atraso del 10%.