El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró ayer que su país podría lograr pronto un acuerdo comercial con China, luego de que el gigante asiático anunciara una ralentización de su producción industrial y suspendiera aranceles adicionales a productos estadounidenses.
"China acaba de anunciar que su economía está creciendo más lentamente de lo previsto debido a nuestra guerra comercial con ellos. Acaban de suspender las alzas de aranceles a Estados Unidos. China quiere un trato grande y global. Podría ocurrir, y bastante pronto", tuiteó el mandatario.
Las declaraciones del magnate republicano tuvieron lugar horas después de que Beijing anunciara la suspensión de los aranceles adicionales para vehículos y piezas de automóviles estadounidenses durante tres meses a partir del 1 de enero de 2019.
Según indicó el ministerio de Comercio chino, el arancel volverá a bajar de un 40 a un 15 por ciento.
Esta decisión se adoptó en el marco de la "tregua" de 90 días en la guerra comercial que los presidentes Trump y Xi Jinping habían acordado al término de la cumbre del Grupo 20 (G20) en Buenos Aires.
El pasado martes, Trump había hablado en Twitter de "conversaciones muy productivas con China" y adelantado "importantes anuncios".
Estados Unidos había prometido que de momento desistiría de su plan de aumentar o ampliar los aranceles a importaciones procedentes de China.
Como contrapartida, Beinjing se había comprometido a aumentar sus importaciones desde Estados Unidos para reducir su superávit en la relación comercial bilateral.
En los últimos meses la guerra comercial entre ambos países afectó la economía del gigante asiático, según un informe diado hoy por la Oficina de Estadísticas de China.
En base a los datos publicados, la producción industrial del país se expandió el 5,4 por ciento interanual en noviembre, cinco décimas menos que la cifra alcanzada un mes antes.
Esta cifra están muy por debajo de los pronósticos hechos por analistas, quienes destacaron que el crecimiento pasó del 5,8 al 5,9 por ciento en octubre y que el nivel de noviembre es el peor dato en 33 meses.
Fuego cruzado
Las dos principales economías mundiales vienen protagonizando desde hace meses una guerra comercial imponiendo de forma recíproca elevados aranceles adicionales a importaciones.
En septiembre, Washington decidió aplicarlos a bienes chinos por valor de 200.000 millones de dólares. Antes ya había impuesto nuevos aranceles a importaciones chinas por valor de 50.000 millones de dólares.
En total, EEUU impuso tarifas adicionales a la mitad de las importaciones procedentes de China, mientras que este país, impuso tarifas a importaciones estadounidenses por valor de 110.000 millones de dólares. Recientemente, sin embargo, se observaron algunas señales de distensión. Por ejemplo, China volvió a importar soja de Estados Unidos. Trump, por su parte, prometió intervenir a favor de la directora financiera de Huawei, Meng Wanzhou, arrestada y posteriormente puesta en libertad bajo fianza en Canadá.