Toma vuelo la crisis de desempleo. La preocupación creciente por los despidos en la Argentina llegó al Congreso, y atraviesa a un amplio espectro de bloques políticos opositores que coincidieron en un dictamen de mayoría declarando la emergencia laboral, y la suspensión de los despidos desde marzo de este año hasta el 31 de diciembre de 2017. El proyecto impulsado por el FpV, FR, Bloque Justicialista, FIT y el PS, entre muchos otros bloques pequeños, por primera vez en el ciclo macrista impone una iniciativa opositora contra la voluntad del oficialismo. Y cuenta con posibilidades de llegar al recinto, y conseguir la aprobación.
La propuesta de ley alcanza al empleo público y privado, y obliga al empleador a pagar doble indemnización en caso de despedir sin causa. Si el despedido no acepta la doble indemnización de todos modos podrá impugnar el despido recurriendo al Ministerio de Trabajo. Las empresas no podrán despedir — ni aun pagando indemnización doble_ sin antes cumplimentar el procedimiento de crisis donde justifiquen las razones objetivas por las que no pueden continuar con esa relación laboral.
Pocas horas después del tratamiento en Diputados, en el Senado, un plenario de la Comisión de Trabajo y Previsión Social, también apuró la firma de un dictamen declarando la emergencia laboral y suspendiendo los despidos. En este caso, la oposición reunió 9 firmas sobre los 17 integrantes de la comisión. Lo que habilita su tratamiento en el recinto.
El dictamen que sumó las firmas necesarias en la reunión de la Comisión de Trabajo de la Cámara baja — presidida por Alberto Roberti del bloque Justicialista-, surgió de la unificación de cerca de 15 proyectos similares, 9 de los cuales provenían del FpV, uno de ellos, a su vez, redactado por la santafesina Lucila De Ponti.
De todos modos, el proyecto se empezó a pergeñar en Diputados a iniciativa de un grupo de legisladores de extracción sindical, en especial de Facundo Moyano, del Frente Renovador. Que impulsó hace pocas semanas un novedoso encuentro con las cinco centrales sindicales en el Palacio del Congreso. Allí surgió el acuerdo, y la decisión de impulsar el proyecto.
Para la diputada Alicia Ciciliani (PS), lo que está en discusión "es una visión ideológica. Para el PRO, cuando se pierden puestos de trabajo se trata de un tema que cae del cielo, como una maldición divina", disparó. Y luego agregó: "Nosotros vemos un derecho en el trabajo".
Lucila De Ponti (FpV) dijo a La Capital que "estamos en un nuevo momento político, la angustia por los despidos ya recorre toda la Argentina y surgen éstos acuerdos entre distintas fuerzas opositoras que hasta ahora no habíamos actuado juntos". La suspensión de los despidos, para el caso de los trabajadores estatales, alcanzaría — de aprobarse la propuesta- a todos las formas de contratación. Ya sea planta permanente, u otras formas de contratos temporales.
El dictamen ahora pasó a la estratégica comisión de Presupuesto presidida por el también rosarino Luciano Laspina (PRO).
También eel diputado de procedencia sindical Omar Plaini, firmante del dictamen, explicó: "Tenemos miles y miles de despidos en la Argentina. Se terminó la supuesta excusa de que eran ñoquis", expresó.
Con dos proyectos lanzados en ambas cámaras, de modo simultáneo, se presume que en un momento se unificarán. El oficialismo de Cambiemos en principio no cuenta con los números para evitar que prosperen, aunque tendrá un último recurso: el veto del Poder Ejecutivo.