Un vendaval de dólares en fuga puso al gobierno contra las cuerdas llevó al Banco Central a dar otro paso hacia el cepo. Ayer restringió a los bancos el giro de utilidades al exterior. Una piedrita para las entidades financieras, que ayer cobraron más de 83 por ciento de tasa de interés para renovar Leliq. La autoridad monetaria perdió u$s 2 mil millones de reservas en un día caliente, caracterizado por un importante retiro de de depósitos en moneda extranjera. También aumentó el volumen de operaciones conocidas como "dólar cable" para liquidar divisas en el exterior. El riesgo país superó los 2.500 puntos.
El default selectivo de la deuda de corto plazo (Letes, Lecap, etc.) que el propio gobierno emitió, profundizó la crisis de confianza en la capacidad del gobierno para defender las reservas y estabilizar el tipo de cambio. En rigor, como una suerte de "paritaria financiera", la administración de Mauricio Macri se sentó sobre la caja del Central y va desvistiendo un santo para vestir a otro.
El miércoles postergó el pago de las letras en manos de inversores institucionales (Ansés, seguros, fondos comunes de inversión) para evitar frenar la compra de dólares. La respuesta fue una ola de pedidos de rescate sobre esos títulos y un incremento en el retiro de depósitos, sobre todo en dólares. Esa huida movilizó ayer al mercado y llevó al gobierno a restringir el giro de utilidades al exterior por parte de las autoridades financieras. Por la Comunicación 6768, deberán contar ahora con su autorización para distribuir sus resultados al exterior.
El dólar subió casi dos pesos, y terminó en $ 62,035 para la venta al público en Buenos Aires. En Rosario a $ 63. En el segmento mayorista la divisa cerró a $ 59,51.
El mercado de cambios se demoró más de una hora en comenzar a operar. El Banco Central realizó cinco licitaciones de u$s 300 millones cada una, aunque el total vendido al final fue de u$s 387 millones.
El volumen operado en el segmento de contado fue de u$s 728,7 millones. Pero os movimientos que más preocupan a los analistas son los del "dólar cable" y la opción de los ahorristas para transformar las divisas del home banking en billetes físicos.
El economista rosarino Federico Fiscella, se mostró preocupado por ambos fenómenos. Los negocios en el mercado del dólar "para llevar con liquidación en una plaza del exterior", y la conversion del dólar electrónico a físico llegaron a u$s 415 millones y u$s 400 millones, respectivamente. "Este movimiento es acelerado y muy fuerte, se duplicó en las dos últimas ruedas, y se da al mismo tiempo", alertó.
Las reservas finalizaron ayer en u$s 54.098 millones. Cayeron u$s 1.943 millones respecto del miércoles, en una jornada en la que se pagaron Letes que no pudieron renovarse. En el mes bajaron u$s 13.801 millones.
La tasa de Leliq subió cinco puntos porcentuales y cerró a 83,264 por ciento promedio. Se adjudicaron $ 165.109 millones.
El riesgo país avanzó hasta los 2.533 puntos. Los bonos se desplomaron. En la semana, la caída fue entre 20 por ciento y 30 por ciento, mientras que en el mes cayeron un 55 por ciento en promedio. La Bolsa porteña subió 2,60 por ciento.
El directorio del FMI se reunió para discutir el caso argentino, pero no emitió declaraciones.
Mientras, sigue el festival de transferencias. El gobierno dispuso nuevos subsidios a gasíferas y petroleras.