El ministro de Economía, Sergio Massa, advirtió este martes a las petroleras que no permitirá “maniobras especulativas o de lockout” destinadas a forzar un aumento del 20% o el 40% en el precio de los combustibles cuyo acuerdo de precios que vence este martes, porque eso significaría “llevarse puesto el bolsillo de los argentinos”, al referirse a los problemas de abastecimiento en las últimas jornadas.
Pocas horas después de que el titular de Hacienda amenazara a las petroleras con impedirles exportar si no normalizaban la provisión de combustible en el mercado interno, la situación de abastecimiento se normalizó, demostrando el éxito de la fuerte apuesta del ministro, en un momento crítico.
En ese marco, Massa convocó para este miércoles a las directivos de las principales compañías petroleras para discutir la política de precios que regirá a partir de noviembre para los combustibles en el segmento minorista, con la idea de que el incremento esté alineado con el esquema de Precios Justos, que prevé subas del 5%, señalaron fuentes del Palacio de Hacienda.
“De golpe aparecieron los camiones. Por más que intenten forzar un aumento del 20 o 40%, no lo voy a permitir”, aseguró Massa quien este fin de semana salió con dureza a pilotear un nuevo frente de tormenta, cuando se generó una situación de desabastecimiento de combustibles en todo el país.
A la espera de la evolución del trabajo de las petroleras, que presentaron a la Secretaría de Energía un “plan de abastecimiento”, el ministro volvió a llamar la atención respecto a que “sin que se haya tomado ninguna decisión todavía, de golpe apareció el combustible”.
“Se habla de los barcos, pero lo que se importa es diesel, no nafta común, no nafta premium, esa se produce en la Argentina, y de golpe aparecieron los camiones”, para abastecer a las estaciones de servicios, dijo Massa, dando a entender nuevamente que en las últimas dos semanas se habría producido una “maniobra especulativa y de stockeo”.
El fondo del problema
A mediados de agosto, las secretaría de Energía y de Comercio Interior validó con las petroleras en la semana posterior a las Paso una suba de 12,5% promedio de los combustibles y el compromiso de no mover los precios hasta hoy como parte de las medidas de compensación por la devaluación del 22%. Por entonces, la negociación incluyó una reducción del precio interno del barril de petróleo a 56 dólares, el congelamiento del tipo de cambio, la reducción de impuesto para las exportaciones, mayor disponibilidad de acceso a divisas y temporariamente un tipo de cambio diferencial para la liquidación.
Fuentes consultadas dijeron que esos acuerdos alcanzados en los últimos meses no fueron respetados desde el momento en que las petroleras “empezaron a especular en los últimos 15 días que luego del congelamiento iba a haber una devaluación y que tras esto surgiría un aumento de al menos 20%”.
Hoy las cuatro principales empresas productoras y refinadoras de crudo afirmaron que a partir de las acciones adoptadas en los últimos días, “se logró recuperar rápidamente la situación de abastecimiento en todo el país” y que se avanza “hacia la total normalización de la situación”.
En un comunicado conjunto, las empresas YPF, Raizen (Shell), Trafigura (Puma) y Pan American Energy (Axion), expresaron que “se continúan realizando los máximos esfuerzos para normalizar rápidamente la situación de abastecimiento de combustibles en todo el país”. El mismo indicó que las acciones implementadas en los últimos días “ya comenzaron a dar resultados y las estaciones de servicio de todo el país confirman que aumentaron los volúmenes de combustible que están recibiendo”.
También las empresas indicaron que “el sector aumentó el ritmo de despacho desde sus refinerías e implementó un esquema especial logístico con más de 4.000 camiones cisterna que permitieron incrementar entre un 10 y un 15% la oferta habitual de combustibles”, explicaron respecto al plan de abastecimiento acordado con el gobierno. Además, ya se sumó el combustible aportado por 5 barcos y se prevé el arribo de dos barcos más que permitirán recomponer los stocks de combustibles.
Eso fue ratificado también por la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha), que nuclea a los estacioneros de todo el país, la cual aseguró que hubo “un incremento” en la provisión de combustibles y que si el abastecimiento continúa en los volúmenes comprometidos, la situación “podrá regularizarse durante la presente semana”.
El presidente de la Federación de Empresarios de Combustible de la República Argentina (Fecra), Vicente Impieri, manifestó que “la situación tiende a normalizarse”, pero “va a llevar unos días para alcanzar el nivel de hace dos o tres semanas”, antes de que comenzaran los problemas de abastecimiento a los usuarios en varios puntos del país.
Una "felicidad" conjunta
“Las empresas petroleras tienen que saber que somos felices cuando aumentan sus exportaciones, somos agradecidos porque generan divisas para la Argentina, somos conscientes que han generado mucha inversión en Vaca Muerta y mucho trabajo en toda la cadena de valor este año, pero que no pueden llevarse puesto el bolsillo de los argentinos”, dijo Massa.
En consecuencia, “si en esa maniobra especulativa pretenden aumentar su volumen de exportaciones porque tienen tipo de cambio diferencial y reducción de impuestos para exportar y perjudican a los argentinos, entre cinco empresas petroleras y 45 millones de argentinos, voy a elegir a los 45 millones de argentinos”, enfatizó.
En el mismo sentido, el titular del Palacio de Hacienda se refirió a las suposiciones sobre aumentos de combustibles tras el fin del acuerdo de congelamiento que vence hoy, que fue alcanzado a mediados de agosto pasado con las empresas YPF, Pan American Energy (Axion), Raizen (Shell) y Trafigura (Puma).
“Así como existen valores de adecuación alrededor de otros precios -analizó-, también tenemos que hacer alrededor del combustible que es un insumo básico en la vida de la gente”.
En ese sentido descartó que en un eventual gobierno suyo pueda avalar una liberación de los precios del petróleo doméstico y de los combustibles para el mercado interno y avanzar hacia una paridad de exportación, lo que ataría los valores locales a las oscilaciones del mercado internacional.
“Escuché al otro candidato -en referencia a Javier Milei- decir que la solución era liberar precios. Claramente los argentinos deben saber que ahí aparecen los dos modelos de país. Con la liberación de precios que propone Milei la nafta valdría 800 pesos, cuando hoy esta 320”, reseñó.