"Es parte de la situación que se está viviendo, en una economía que está planchada, y en un país que tiene una tasa de inflación alta. Nuestra economía está bien, sincerada y transparente. No tenemos ningún tipo de cosa que esconder. Estamos en una provincia donde recién ahora estamos pidiendo poder emitir letras de corto plazo, mientras el déficit del país será este año de 300 mil millones de pesos. No me asusta", indicó.
Asimismo, aseguró que “los salarios están garantizados” y que de todas formas no se está parando ninguna obra pública. “Entendemos que son necesarias y que son derecho de los santafesinos”.
Con respecto a las críticas que recibió por haber impulsado ciertos tributos el gobernador mantuvo su postura. “Yo voy a sostener aquello que entiendo, desde la función que ejerzo, para defender los intereses de los santafesinos. No hay sociedad que pueda funcionar sin impuestos”, finalizó.