La firma de origen italiano Arneg, que fabrica equipamiento para la industria de la refrigeración, presentó hace dos semanas la ampliación de su planta en zona sur con la incorporación de una prensa con tecnología de avanzada para elaborar paneles de poliuretano. La inversión de 36 millones de pesos (de los cuáles 20 provienen de financiamiento gubernamental vía un crédito del Bicentenario), le permitirá a la firma empezar a competir en el mercado de la construcción, así como achicar costos y mejorar los productos que ya le ofrecen a su clientes tradicionales.
Arneg apoya buena parte de su dinámica en el mercado interno, ya que provee de equipos a algunas de las mayores cadenas de supermercados del país, cuyas ventas se triplicaron durante los últimos años. Con esto, además, la compañía busca compensar las cifras de sus ventas externas, afectadas durante los últimos años por un combo de factores que incluyeron tanto el aumento de costos internos por la inflación, como la pérdida de competitividad por el valor del dólar respecto al peso.
Sebastián Román, gerente industrial de la planta ubicada en el comienzo de la autopista a Buenos Aires, precisó los detalles de la inversión y adelantó las grandes líneas de acción de la firma para este año.
—¿Cuál es el alcance de la inversión?
— Lo más importante que hay que saber es que se trata de una prensa con tecnología líder a nivel mundial, es la tercera que aparece en Argentina y hay muchos países que ni siquiera la tienen. Eso significa que ganamos un mercado nuevo, el de la construcción, ya que esto permite desarrollar la construcción en seco a través de la chapa y el acero. También nos permite brindar un mejor producto a un menor costo, gracias al proceso productivo innovador que tiene, a un mayor número de clientes que tenemos respecto a paneles de aislación para cámaras frigoríficas. Con esta inversión sumamos tecnología de punta, calidad superlativa, eficiencia superlativa, bajo costos, y sobrada capacidad productiva, en definitiva tiene todos los atributos que tiene que tener para cumplir con los objetivos de la empresa. De arranque, se crearon 17 puestos de trabajo para cumplir un turno, la capacidad es esa. Respecto a los proveedores, se sumó una decena a los 300 que tenemos ya en la región, recordemos que Arneg nació de Raffo, de la línea blanca, y Rosario es un polo de la línea blanca, un polo de la refrigeración, por lo que la mayoría de los proveedores son de Rosario y del gran Rosario.
—¿Se trata de una estrategia propia, o forma parte del plan global del grupo Arneg?
— En realidad esto ya lo inició Arneg en Italia. Pero dentro de las 17 plantas del grupo, somos la segunda que posee esta tecnología, eso significa un apoyo muy grande y una gran confianza en Argentina que nos enorgullece. No olvidemos que en Argentina somos grandes productores de alimentos, que cada vez se conservan mas y cada vez son menos estacionales. Eso significa cámaras frigoríficas donde sea, por eso estamos en un muy buen país, en una muy buena zona para el negocio para aplicar este producto.
— ¿Cuáles son las perspectivas del negocio para 2013?
— Estamos un poco preocupados porque estamos perdiendo mercados de exportación, tanto por el dólar como por la inflación interna. Eso nos ha llevado a tomar algunas decisiones a nivel de la cadena productiva y también a nivel comercial, pero pensamos, y somos muy optimistas al respecto, revertir la tendencia que venimos viendo estos últimos años. Hemos afinado algunos productos que nos permiten ser un poquito más competitivos, hemos fortalecido un poco la fuerza comercial, y esperamos revertirlo. Por otro lado, está claro que en el mercado nacional esperamos seguir creciendo.
—¿Se han visto afectados por la política oficial de restricción de las importaciones?
—Esas medidas nos han afectado, francamente hay que decir que no hemos llegado a tener nada que quede retenido en la aduana, el mayor problema que hemos tenido radica en los tiempos, porque cuando necesitás el producto no lo tenés, y eso fue lo que mas nos afectó. Sentimos fuerte la falta de productos en los tiempos adecuados, y eso nos hace mas ineficientes. Eso nos puede generar la posibilidad de perder un cliente porque no le entregamos a tiempo, porque se enojó, o porque ese material no estaba.
— ¿Fortalecieron la política de la red de proveedores locales?
— Algunos productos podemos desarrollarlos de manera local, pero a veces los tiempos —cuando se implementaron estas nuevas medidas—, no cerraron. La política de Arneg es desarrollar los proveedores locales, y sólo salimos afuera cuando los proveedores nuestros nos dicen que no nos pueden acompañar, cosa que nos duele. Es difícil encontrar alternativas en el abanico de proveedores, las plantas en Italia tienen 400 veces más proveedores que nosotros, acá no es tan fácil. Igualmente, sólo hemos vendido mercadería italiana en el mercado exterior, no en Argentina, acá vendimos todo nacional, y hemos hecho eso cuando la competencia nos ganaba. Arneg Argentina puede perder mercado, pero no puede permitir que Arneg world pierda mercados.
—¿El mejoramiento de los proveedores es una apuesta de la firma?
— Las herramientas que hoy las instituciones gubernamentales les ofrecen a las pymes, son la mejor forma de que los proveedores mejoren rápidamente la calidad, los costos, y el servicio. Despacio, vamos notando un cambio y una mejor calidad, no en todos los proveedores, pero lo notamos. Francamente, cuesta llegar a la calidad de Europa por la variedad de materiales con la que se encuentran, por los lotes productivos, y por el retorno de inversión que puedan tener debido a esos lotes. Pero estamos mejorando la calidad.