La vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca Bocco, aseguró ayer que el gobierno apuesta al diálogo con los empresarios del sector agroindustrial para frenar la suba de los alimentos pero no descartó subir las retenciones a la exportación de materias primas si esta concertación no da resultado.
“No se descarta una suba de retenciones, no tenemos tantas herramientas y tenemos que usar todo lo que tengamos, nosotros apostamos al diálogo”, remarcó Todesca Bocco a radio El Destape.
Dijo que que “las retenciones son una herramienta técnica que permite desacoplar el precio nacional del internacional, para garantizar una oferta de alimentos a un precio razonable para los ingresos de las familias”, y consideró que “la solución no puede ser que los precios de los alimentos se disparen por la suba del precio internacional y que todos nos quedemos mirando”.
“Nosotros estamos dando lugar a las conversaciones para que no se nos diga que actuamos en exabrupto”, afirmó la funcionaria, quien destacó que el gobierno tiene “como objetivo para este año una inflación del 29% y trabajamos para que se cumpla”.
“No va a ser fácil pero debemos intentarlo”, afirmó Todesca Bocco, quien señaló que “la meta es factible si todos nos ponemos de acuerdo en las trayectorias de las principales variables, que son las que venimos hablando: tipo de cambio, precios, salarios y tarifas”.
La vicejefa de Gabinete reconoció que “en la Argentina hace rato que tenemos un nivel de inflación elevada”, y advirtió que “el proceso es complejo y en el centro de la escena está la puja distributiva”.
El miércoles, el gabinete económico confirmó la convocatoria, para la semana próxima, a sindicalistas y empresarios para avanzar en un acuerdo de precios y salarios. La propia Todesca Bocco dijo, en el informe posterior a la reunión, que el gobierno aspira que los salarios le ganen tres o cuatro puntos a la inflación.
Paritarias
Estas maniobras de aproximación se realizan en simultáneo con las primeras negociaciones paritarias del año. En algunos casos, como el acuerdo de mercantiles el mes pasado y el de la carne hace pocos días, se trata del cierre de la paritaria de 2020, que estuvo caracterizada por la demora, la dispersión y la proliferación de sumas fijas. Buena parte de los acuerdos se firmaron a partir del segundo semestre, muchos fueron cortos y con sumas fijas no remunerativas, que se extiden hasta el primer tramo de 2021.
Los trabajadores aceiteros fueron los que elevaron, tras una histórica huelga en diciembre. Y para 2021 acordaron un aumento del 25%, con revisión en agosto próximo.
Por estos días comenzaron las negociaciones con los gremios estatales en Santa Fe. El sector público siempre marcó la referencia para la primera parte del año. Pero en 2020 casi no hubo negociación salarial. De hecho, las provincias fueron el año pasado uno de los principales impulsores de la baja del salario real.
Un informe de ATE Rosario estimó que los trabajadores estatales santafesinos perdieron el equivalente a un mes de salario y medio aguinaldo el año pasado. El ahorro para las arcas públicas, señalaron, equivalió al 38% el superávit financiero que logró a septiembre la administración de Omar Perotti. Ahora, el gremio propone un aumento inicial en enero 2021 del 29% y una revisión en septiembre.
Gremios y empleadores están atentos a las pautas que surjan del acuerdo de precios y salarios.
En cuanto al primero de los temas, Todesca Bocco advirtió que partir de septiembre hubo una aceleración: La vinculó con el aumento de la brecha con el dólar y la suba del precio de los productos que exporta la Argentina.
Por eso blandió la amenaza de las retenciones. de hecho, pro ley el gobierno está autoriazado a subir del 12% al 15% las alícuotas para trigo y maíz. Esta advertencia impactó en el mercado de granos local, donde exportadores decidieron dejar de realizar ofrecimientos.