Perseguidos que son a la vez perseguidores
El juego de la mancha, de Eduardo Levy Yeyati. Random House, 240 páginas, $349.
Falsas denuncias, el accionar descontrolado de grupos de inteligencia, una sucesión de siniestros, un reguero de cadáveres y la sospecha de todos contra todos. La resistencia es inútil: cualquier excusa es válida para acabar fichado. Nadie se salva de ser, a la vez, perseguido y perseguidor, como en el juego de la mancha: "Si sabés algo, si conocés a alguien que sabe algo, sos boleta". Fantasía retrofuturista, esta distopía melancólica nos sumerge en una historia tan sinuosa como atractiva.
Cuatro crímenes oscuros e inexplicables
Magnetizado, de Carlos Busqued. Anagrama, 152 páginas, $325..
A lo largo de una fantasmal semana de septiembre de 1982, se sucedieron en Buenos Aires cuatro asesinatos nocturnos, sobrios en el despliegue y curiosamente idénticos, a tal punto que se podría pensar en un mismo crimen repetido cuatro veces. La policía buscó al asesino durante casi un mes, de manera tan intensa como inútil. Finalmente resultó ser un posadolescente de 19 años. Carlos Busqued, consagrado con Bajo este sol tremendo, vuelve a narrar en clave de oscuridad.
Figura controvertida y también apasionante
Bartolomé Mitre, de Eduardo Míguez. Edhasa, 440 páginas, $485.
El siglo XIX argentino es pródigo en personajes polifacéticos. Alberdi y Sarmiento son una prueba eminente de ello. Otro gran ejemplo es el siempre cuestionado Bartolomé Mitre: poeta y traductor de La divina comedia; historiador, militar, presidente y fundador del diario La Nación. Y aun esta enumeración, de por sí sorprendente, no alcanza para calibrar la importancia de su figura. En esta biografía, Eduardo Míguez analiza la figura política de Mitre y su rol en la organización nacional.
Una fábula clásica que se adapta bien al presente
Riquete el del Copete, de Amélie Nothomb. Anagrama, 128 páginas, $245.
Déodat es el bebé más feo del mundo, pero a medida que crece demostrará poseer una mente privilegiada. Sin embargo, tendrá serias dificultades para comprender los misterios del amor. Trémire, por el contrario, es una niña de una belleza arrebatadora, pero se muestra pasiva y parece no reaccionar ante las provocaciones. Retomando la fórmula que ya utilizó hace unos años en Barba Azul, la exitosa Nothomb vuelve a reinventar un cuento de Perrault, trasladándolo al mundo actual.