Las pruebas genéticas confirmaron que Lucas Gómez, acusado de haber asesinado a su hijastra de 12 años en marzo y que se suicidó mientras estaba detenido en una cárcel de San Luis, también la había violado, informaron hoy fuentes judiciales.
El Laboratorio de Genética Forense de Laboratorios Puntanos presentó los resultados de los exámenes que se cotejaron de las muestras extraídas a las uñas, la boca y la zona genital de Florencia Di Marco.
Fuentes judiciales informaron que las pruebas de ADN coincidieron con las de su padrastro, por lo que quedó demostrada la violación por parte de Gómez (32) y complicó la situación de la madre de la víctima, llamada Carina Di Marco (32), quien continúa detenida como presunta partícipe necesaria de los abusos que sufrió su hija.
El hombre estaba detenido desde el 27 de marzo último, acusado del crimen de Florencia, hija de su pareja, cuyo cadáver fue encontrado el 23 de ese mes debajo de un puente en la localidad de Saladillo, a 55 kilómetros de la capital puntana.
El 10 de mayo Gómez apareció en su celda colgado del cuello con un cordón de su pantalón de joggin que ató a un cable que salía de una pared.
Las fuentes agregaron que el hombre dejó una carta a la madre de la niña en la que decía que la chica "se suicidó en su habitación" y que, ante el temor de que pudieran acusarlo a él, se drogó, se emborrachó y decidió arrojar el cuerpo debajo de un puente.
La jueza de la causa, Virginia Palacios, había dispuesto procesarlo y dictarle la prisión preventiva por el delito de "abuso sexual con acceso carnal, doblemente agravado" y "homicidio agravado criminis causa, por perpetrarse con alevosía y mediar circunstancias de violencia de género".
La magistrada también detuvo y procesó a la madre de la niña asesinada, ya que consideró tener las suficientes evidencias que demostraban que la mujer "conocía que la niña era abusada por su pareja", según lo manifestó en el momento de tomar la medida.
La madre quedó acusada de "abuso sexual con acceso carnal agravado, por su calidad de progenitora, respecto de la víctima, por su condición de guardadora y por mediar la condición de convivencia preexistente" y la jueza consideró que era "partícipe necesaria de los abusos que sufría Florencia desde mucho tiempo atrás por parte de Gómez".
El padre del ahora fallecido Gómez, que era oriundo de San Martín, Mendoza, también se suicidó años atrás.